Rosario cargada de humo. La postal repetida hasta el ahogamiento en pandemia es inolvidable y pone en alerta a la ciudad ante la advertencia de la llegada de los restos del fuego que arde en el Amazonas. Sin embargo, no es el único residuo que pueda arribar al cielo local: también podría llegar desde la isla entrerriana, donde los focos volvieron a encenderse. Desde la Universidad Nacional de Rosario (UNR) anticiparon un período incendiario promovido por la sequía.

En diálogo con Radiópolis (Radio 2), el secretario de Política ambiental de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Matías Bueno, se refirió al pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional de la presencia de humo proveniente de enormes incendios forestales que se registran desde hace varios días en Brasil y Bolivia. “Hay una quema sin precedentes”, evaluó el especialista, quien señaló que se ha acabado con 4 millones de hectáreas en lo que va del año en la zona.

“La advertencia es sobre una lluvia negra, el esparcimiento de las cenizas. Esta pluma ya llegó en Salta con solicitud de cuidados en rutas y de no salir, gener problemas, sobre todo, en personas con enfermedades previas”, explicó. Sin embargo, advirtió seguidamente: “Es probable que mañana llegue el humo de las 350 hectáreas que se están incendiando frente a Rosario, si el viento rota del noreste”.

“Vamos a tener humo pero no del Amazonas sino producto de la quema en las islas. Algunos investigadores de la universidad plantearon que es más probable que venga el viento sur a empujar esta pluma antes que llegue hasta acá y están más preocupados por los incendios de las islas y de Córdoba”, remarcó.

Lo que viene, no siempre es mejor. El profesional vaticinó una primavera y un verano bajo fuego: “Se pronostica una temporada de incendios violenta porque la sequía es feroz”, lanzó y observó: “La problemática del cambio climática nos hace zambullir en fenómenos climáticos extremos”. En ese sentido, mencionó: “A fin del año pasado y principio de este año, hubo inundaciones en Brasil con el fenómeno del Niño y hoy hay sequía extrema en esa región con incendios. En nuestra región esperamos bastante sequía”.

Con respecto a la bajante del Paraná, precisó: “Hoy está pisando el metro pero hace 20 días medía 48 centímetros. Pero no se esperan lluvias en las nacientes, no va a tener una altura mayor”.

Sobre las herramientas con las que se cuentan para ponerle un freno al fuego, De Bueno, respondió: “Esta es una opinión, no es ciencia –aclaró y siguió–estamos bastante complicados, hay un desfinanciamiento con la problemática ambiental en lo que es politica nacional sin medición de consecuencias, se niega la problemática”, dijo.

“Los dirigentes regionales, los actores locales siguen manteniendo estandares de ministerio de ambiente o secretaría, no como Nación que de tener un ministerio pasó a tener una subsectrtaria con un desfinanciamietno también de la universidad. Entonces, los recursos van a ser muy finitos”, mencionó.

“El equilibrio fiscal es importante, pero hay políticas estatales que se tienen que llevar adelante. Vamos a entrar en un período marcado por el fuego, y vamos a combartirlo con la nada misma”, lamentó.