Los floristas del cementerio La Piedad y los familiares de los fallecidos enterrados en ese camposanto de la zona oeste de Rosario reclamaron un protocolo de apertura en medio de la pandemia de coronavirus.
Los comerciantes aseguraron a De 12 a 14 (El Tres) que cayó hasta un 90 por ciento la venta de flores por la ausencia de visitantes a las tumbas de los seres queridos.
“Hace un mes que estamos sin poder trabajar. Comprás flores y a los tres o cuatro días las tirás porque no se puede vender a nadie. No permiten más de tres personas por servicio, que te compran un ramo o un clavel y nada más”, comentó una de las mujeres.
Los titulares de los puestos, algunos con hasta 80 años de trayectoria familiar, reclamaron medidas similares a las adoptadas en los sectores gastronómicos, comerciales y mencionaron como contraste: “Hasta los shoppings y los gimnasios abrieron”.
Los familiares consultados señalaron que con un reglamento mínimo de conducta y un turno de al menos dos horas por día podrían regresar a una actividad que consideran vital e íntimo.
“Hace un mes que no puedo visitar a mi hijo”, resumió uno de los hombres que se acercó a la necrópolis de Provincias Unidas 2750 para el reclamo conjunto. Otra mujer pidió por su hermano fallecido y una más dijo tener a "muchos familiares".
“Por lo menos que habiliten dos horas como en Buenos Aires para estar con ellos un ratito, como un acto religioso. Pedimos una pronta respuesta y no venir todos los días a preguntar”, agregaron.