En medio de una semana en la que se realizan distintas manifestaciones contra el veto a la ley de financiamiento universitario, este último lunes se presentó ante el Consejo Superior de la UNR un proyecto para declarar “persona no grata” a los cinco diputados santafesinos que acompañaron al presidente Milei en el rechazo de la misma. Una de ellas, es la rosarina Germana Figueroa Casas, egresada y docente de la casa de altos estudios, quien al ser consultada sobre la propuesta elevada por un consejero superior de la agrupación Alde, consideró: “No puedo ser castigada por mis opiniones ni por mi voto. La universidad está para formar gente que respete, que tenga distintas ideas. No creo que el proyecto prospere”.
En conversación con el programa El Contestador (Radio 2) la diputada nacional del PRO explicó el porqué de su voto apoyando el veto presidencial a la ley de financiamiento universitario.
“Es bastante difícil la situación. No era una decisión fácil votar a favor o en contra del veto. Quiero que quede claro que la ley era una paritaria y actualización de gastos de funcionamiento. Acá tiene que haber un trabajo del Ejecutivo y hay que decir que no lo hicieron como debieron. El Congreso no tiene que involucrarse en esto”, profundizó.
Al referirse a la propuesta, que también involucra a Romina Diez; Alejandro Bongiovanni; Luciano Laspina y Nicolás Mayoraz por tratarse de profesionales recibidos en facultades públicas y ratificar el veto presidencial contra el financiamiento de las mismas, sentenció: “La verdad no lo puedo creer. Siempre pensé que la UNR era una universidad plural, en la facultad siempre hubo gente con distintas posiciones políticas. Me parece increíble que esto pase porque voté de determinada manera, que es legal, está en la Constitución”. No obstante, vaticinó: “No creo que este proyecto prospere”.
A su vez, Figueroa Casas, quien se desempeña como docente desde hace 20 años en la UNR, comentó que recibió un aluvión de insultos, tanto “en público y en privado”. “No puedo ser castigada por mis opiniones ni por mi voto. Me cuesta entenderlo. La universidad es pública, tiene autonomía, pero está pagada por todos los argentinos”, sumó.