La Secretaría de Control de la Municipalidad de Rosario desarrolló entre el viernes y el domingo pasados, distintas intervenciones de control nocturnas y diurnas en espacios públicos y privados de la ciudad. Se desbarató una fiesta clandestina y se detuvieron a cuidacoches. 

De acuerdo a fuentes oficiales,  se desbarató una fiesta clandestina en Uriburu al 7500. Los agentes de la Secretaría der Control acudieron luego de la denuncia de vecinos por ruidos molestos. Ya en el sitio se encontraron con un evento con más de 1200 personas, tres carpas y una barra con venta de bebidas alcohólicas. Se pudo ingresar al lugar y, de a poco, se logró desalojar.

Antes de culminar la intervención, se informó y aguardó la llegada de los padres de quienes participaban dado que la gran mayoría eran menores de edad. Finalmente, al organizador se le labró la infracción del caso y deberá comparecer ahora ante el Tribunal de Faltas.    

Con respecto a los cuidacoches, se efectuaron patrullajes en distintos puntos de la ciudad, especialmente en los sectores más concurridos, cómo por ejemplo, la zona de la costanera, avenida Pellegrini y Pichincha, entre otros sitios.  En ese sentido, el operativo más importante se montó el viernes a la tarde-noche en la zona de la ex Rural, en el parque Independencia,  en donde se desarrolló el Cumbión del Paraná.

Allí, y cómo se viene desarrollando en distintos eventos masivos, se implementó un dispositivo especial de control, ordenamiento vehicular y estacionamiento entre las calles Ovidio Lagos, Gálvez, Moreno. Dante Alighieri, Oroño y Lugones. Además se inspeccionó la venta ambulante, que derivó en el secuestro de bebidas alcohólicas en algunos casos. En ese marco, hubo 4 cuidacoches demorados y 32 disuadidos o retirados del lugar, labrando en estos casos el acta de infracción municipal correspondiente.

Operativos de tránsito

En el caso de los controles vehiculares, entre el pasado jueves por la noche y este domingo se llevaron a cabo 721 fiscalizaciones a conductores en diferentes puntos, lo que incluyó también operativos antipicadas. Se verificó la documentación, el uso correcto y visible de la patente, los elementos de seguridad y se hicieron test de consumo de alcohol y sustancias prohibidas.

En ese sentido, se remitieron 69 vehículos al corralón, de los cuales 28 eran conducidos por personas que al ser sometidas a test de alcoholemia dieron resultado positivo. El resto de las incautaciones fueron por incumplimientos en materia de papeles, falta y/o uso de patente tapada y seguridad vial.

En tanto, también continuaron las fiscalizaciones sobre servicios de transporte de pasajeros que operan en forma irregular. En este caso hubo 4 remisiones, todas correspondientes a aplicaciones promocionadas por fuera de la normativa vigente,