Las Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá) presentaron este viernes las cifras del horror: de enero a marzo se perpetraron 116 muertes violentas de mujeres, travestis y trans. Una muerte cada 18 horas.
El informe fue producido a partir del análisis y monitoreo de medios digitales y gráficos de todo el país, buscadores, sistema de alertas, seguimiento de organizaciones, portales especializados en género, feminismo, Derechos Humanos y policiales/forense. Los datos brindados por el Observatorio MuMaLá revelan las formas más extremas de violencia de género ocurridas desde el 1 de enero hasta el 30 de marzo de 2023 en todo el territorio argentino.
Entrando en detalles, la ONG informó que 61 femicidios fueron directos, tres vinculados de niñas/mujeres, seis vinculados de niños/varones, un trans/travesticidio y diecisiete muertes violentas asociadas al género, vinculadas a economías delictivas o colaterales como narcotráfico, venganzas, deudas y a delitos comunes tales como robos, ajustes de cuenta, venganza y extorsión.
Por otro lado, hubo 26 muertes violentas en proceso de investigación, de los cuales dos corresponden a suicidios femicidas. Y un dato no menor: se produjeron 137 Intentos de femicidios y 63 niños, niñas y adolescentes se quedaron sin madres.
En relación con el lugar donde se cometieron los hechos, la vivienda de las víctimas continúa siendo el lugar más inseguro. El 62 por ciento de esas muertes estuvo en manos de parejas o ex. Además, el 16 por ciento de las víctimas de femicidios había denunciado a su agresor y el 70 por ciento de ellas tenía orden de restricción de contacto o perimetral, un el 20 por ciento contaba con botón antipánico.
En Santa Fe fueron 15 muertes violentas, de las cuales: cuatro corresponden a la figura de femicidios; cuatro muertes en investigación, siete en contexto de narcocriminalidad o delitos conexos y en un mes hubo tres intentos de femicidios.
"Desde MuMaLá el pasado 8M alzamos la voz en el marco del día internacional de las mujeres, para exigir que el estado actúe con políticas integrales y de calidad para ponerle fin a esta cada vez más marcada feminización de la pobreza", apuntaron desde el movimiento feminista y agregaron: "Este mes volvimos a presentar -por tercera vez- el proyecto de ley de Emergencia Ni Una Menos debido a que es evidente la necesidad de priorizar recursos humanos y económicos para la atención de mujeres e integrantes del colectivo LGTBIQ+ en situación de violencia de género".