El año en la gestión provincial del desarrollo social comenzó con un reordenamiento de la distribución de los recursos que hizo frente al aumento de la demanda, sobre todo en las dos principales ciudades, Rosario y la capital provincial, donde fueron creciendo la pobreza y la indigencia a lo largo de los meses. Al cierre del mismo año, el secretario de Desarrollo Territorial, Sergio Basile, destacó que la demanda a lo largo del 2024 se elevó en un 30 por ciento.
En un balance de lo abordado a lo largo del año, el funcionario destacó: “Sabíamos que íbamos a tener un año difícil, pero no cuál iba a ser la magnitud. Fue de un 30 por ciento la suba de demanda por parte de los comedores, merenderos y copa de leche”, en diálogo con Ivana Fux en corresponsalía de De 12 a 14 (El Tres).
“El ordenamiento que se realizó desde el comienzo de gestión nos permitió tener un número realista en cada barrio, y establecer criterios de redistribución. Hicimos auditorías y actualización de los listados, y eso hizo que tengamos un detalle más pormenorizado en el territorio”, aseguró Basile.
Precisó que “Rosario y Santa fe son las ciudades donde más trabajo territorial se realiza, por su densidad poblacional, y por sus índices de pobreza e indigencia. En Santa Fe la pobreza es más estructural y arraigada, por lo que nos resulta un desafío trabajar en el Gran Santa Fe”.
En la provincia de Santa Fe, el porcentaje de hogares por debajo de la línea de pobreza alcanzó el 42,5% (en los que reside el 52,9% de las personas) y dentro de este conjunto se distingue un 13,6% de hogares por debajo de la línea de indigencia (que incluyen al 18,1% de las personas), según estableció el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En ese marco, el gobernador Maximiliano Pullaro prorrogó hace una semana, y por seis meses, la emergencia educativa, sanitaria y sobre todo social, que permite mayores recursos para asistir en los barrios. Sobre esto, Basile apuntó: “La prórroga se sustenta en los aumentos de pobreza que estableció el Indec, y haberla decretado el gobernador, permite mayores recursos para distribuir”.
Redistribución de los recursos
El referente del Desarrollo Territorial recordó en torno a lo trabajado: "Al asumir en diciembre vimos que los recursos estaban mal distribuidos. Entonces los recuperamos y redistribuimos. Se realizaron bajas de algunos comedores que no estaban en regla, pero también abrieron 300 nuevos espacios, que nos permitió recuperar y tener una mayor cantidad de comedores que el año pasado en toda la provincia". En torno a cómo se trabajó, Basile destacó: "Tenemos unidades descentralizadas en todo el territorio en vinculación con los gobiernos locales, y observamos que la demanda llegó desde todos los rincones". Finalmente, agregó que "una vez que llega una demanda por primera vez, se acercan los equipos y se coordina para qué cantidad de gente se va a trabajar y cuáles días de la semana atenderán. Y si se detecta una demanda en un barrio que tiene algún comedor cercano, se los deriva para evitar superpoblar de comedores en un mismo barrio”.