Casi 300 personas murieron y unas mil se enfermaron en Irán por la falsa creencia de que el metanol cura el coronavirus, en una claro y crudísimo ejemplo del peligro de la desinformación y las fake news.
Según informó Télam, los envenenamientos mortales con metanol, un alcohol de uso industrial que es altamente tóxico, constituyen una epidemia dentro de la pandemia que tiene en vilo a Irán, donde los casos de coronavirus superan ya los 32.000 y lo sitúan como el país más afectado de Medio Oriente.
En las últimas semanas, por Internet y en las redes sociales circula en Irán falsa información sobre remedios que curan el coronavirus, en medio de alta desconfianza hacia el gobierno luego de que éste minimizara la crisis durante días hasta que los casos comenzaron a multiplicarse.
Hasta ahora, no se conoce una cura para el covid-19, la enfermedad causada por el virus detectado en China en diciembre pasado. Especialistas de varios países están estudiando el comportamiento del virus y buscando medicamentos efectivos y una vacuna.
Pero en mensajes enviados y reenviados una y otra vez, cuentas de redes sociales iraníes han afirmado que un maestro británico y otras personas se habían curado con whisky y miel.
Mezclado esto con mensajes sobre el uso de alcohol en gel para lavarse las manos, algunos han creído que beber alcohol puro mataría el virus en sus cuerpos, según varios medios locales, informó la cadena CNN.
Los medios dijeron que el temor al virus, sumado a una pobre educación y a los rumores de Internet, hicieron que decenas de personas enfermaran por tomar alcohol adulterado con metanol en la provincia de Khuzestán, en el suroeste del país, y en la sureña ciudad de Shiraz.
Entre los muertos hubo un nene de cinco años, informaron los medios, que además reportaron otro casos en las ciudades de Karaj y Yazd.
Tomar bebidas alcohólicas está prohibido en Irán, un país musulmán con un régimen de gobierno teocrático, y lo que las consumen por lo general las consiguen de contrabandistas.
Autoridades iraníes empezaron a implementar su plan de distanciamiento social con medidas más estrictas para contener el coronavirus, que ha causado hasta ahora de 2.378 muertes entre los más de 32.000 contagiados.
Según cifras del Ministerio de Salud, en las últimas 24 horas se han confirmado 2.926 nuevos casos de contagio, de los que 144 han fallecido.
Un total de 11.133 personas se han recuperado.
El plan de distanciamiento social estará en vigor hasta el 3 de abril, cuando terminan las vacaciones del año nuevo persa, pero "se extenderá si así lo aprueba el Comité Nacional de Gestión del Coronavirus", según la normativa publicada.
Entre las principales restricciones que estipula el plan figura que a las ciudades solo pueden entrar los residentes de las mismas, con el fin de impedir los viajes que numerosos ciudadanos realizaron con motivo de las vacaciones del año nuevo persa.
Las escuelas y universidades permanecen cerradas y queda prohibido la celebración de cualquier ceremonia, sea oficial o informal.
Los lugares turísticos y centros de ocio quedan clausurados, así como los jardines y parques que estaban ya hoy cerrados fuera con sus propias vallas o con cintas de seguridad, informó la agencia de noticias EFE.
Los comercios, salvo los de primera necesidad, tampoco pueden abrir sus puertas, mientras que los funcionarios de las oficinas de la administración pública acudirán en turnos con un máximo de un tercio del personal.
También se van a aplicar restricciones en el transporte de pasajeros en avión, tren y autobús, indica la normativa, que recoge la imposición asimismo de multas a los infractores.
En la lucha contra la pandemia, Irán ha empezado además a probar el tratamiento con plasma, que consiste en inyectar el plasma de personas que se han recuperado del coronavirus en aquellas que están enfermas.