Febrero se empieza a despedir con un anticipo de lo que se viene para el otoño. Al calor que nos tiene acostumbrados la temporada estival, se le sumó una humedad cercana al 100 por ciento y bancos de niebla que generaban algunas complicaciones para quienes tuvieron que salir temprano por la mañana este viernes a las calles de la ciudad.

A primera hora de este viernes la temperatura se ubicaba en los 16 grados, la humedad en el 99 por ciento y la presión era de 1010.2 hPa. Por la niebla, la visibilidad estaba reducida a menos de 1 kilómetro por lo que la recomendación era circular con precaución.

Ya durante la tarde el cielo permanecía despejado y, para las 15, la temperatura superaba los 30ºC. El pronóstico de lluvias, que en principio anunciaba posibles precipitaciones durante la tarde, se desplazó para la noche. El SMN anticipaba entre un 40% y un 70% de probabilidad de caída de agua.

De cara al fin de semana, para el sábado también hay advertencia por precipitaciones, pero luego el verano recupera terreno y se espera una jornada agradable con máxima de 34 grados. Algo similar a lo que se pronostica para el domingo.