El Arzobispado de Rosario volvió a referirse a Leda Bergonzi, la mujer a la que se le adjudican sanaciones y que cada martes congrega a miles de personas, desde hace ya tres semanas en la ex Rural de Rosario,. La Iglesia Católica explicó de qué se trata su acción espiritual y aseguró que apoya y acompaña el fenómeno de fe.
El comunicado del Arzobispado de Rosario indica que se recibieron diversos pedidos de notas periodísticas y consultas de fieles sobre “la actividad eclesial de la señora Leda Bergonzi” por lo tanto, optaron por emitir una apreciación al respecto y enviarla a los medios de comunicación.
“Este fenómeno religioso que se ha expandido en estos meses es un fenómeno que se da dentro de la Iglesia Católica. Dentro de la Iglesia hay diversas expresiones, grupos, etc. Uno de esos grupos, de carácter carismático, es la comunidad "Soplo de Dios viviente". Está configurada como un grupo de oración y evangelización. Esta comunidad viene desarrollando sus actividades desde hace unos ocho años; siempre acompañada por un sacerdote del clero diocesano de Rosario”, comienza el escrito.
“En las primeras comunidades cristianas, como es el caso de la comunidad de Corintio, el Espíritu Santo derramaba dones y carismas para la edificación de la Iglesia, para el servicio del bien común de la obra evangelizadora. Para ello basta consultar la Primera carta a los Corintios capítulos 12 al 14. En esos párrafos de la Sagrada Escritura, entre otras cosas, dice: «A cada cual se le otorga la manifestación del Espíritu para provecho común. Porque a uno se le da por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo Espíritu; a otro, fe, en el mismo Espíritu; a otro, carismas de curaciones, en el único Espíritu; a otro, poder de milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversidad de lenguas; a otro, don de interpretarlas. Pero todas estas cosas las obra un mismo y único Espíritu, distribuyéndolas a cada uno en particular según su voluntad.»(Cf. I Cor 12,7-11) (a cualquier miembro de la comunidad, sea varón o mujer)”, continúa el texto.
El Arzobispado local aseguró que “dentro de la comunidad Soplo de Dios viviente, se comenzaron a experimentar alguno de estos carismas, en particular en la persona de la Sra. Leda Bergonzi”. En ese sentido, indican: “La Iglesia de Rosario, viendo los frutos buenos que produce en mucha gente, acompaña este fenómeno para ir discerniendo la profundidad y solidez del mismo. Para ello, los criterios del discernimiento se basan en el Evangelio de San Mateo capítulo 7, versículo 20: «Por sus frutos, entonces, ustedes los reconocerán»; en el libro de los Hechos de los Apóstoles capítulo 5, versículos 38-39: «No se metan con esos hombres y déjenlos en paz, porque si lo que ellos intentan hacer viene de los hombres, se destruirá por sí mismo, pero si verdaderamente viene de Dios, ustedes no podrán destruirlos y correrán el riesgo de embarcarse en una lucha contra Dios». y en el Evangelio de San Lucas capítulo 10, versículo 16: «El que los escucha a ustedes, me escucha a mí; el que los rechaza a ustedes, me rechaza a mí»; se refiere a la obediencia a la autoridad de los Apóstoles y a sus sucesores los Obispos”, precisaron.
“El fin por el cual el Señor dota a una comunidad de dones y carismas: los signos portentosos se dan para corroborar la potencia del anuncio evangélico, para certificar la presencia del Resucitado en su Iglesia. El poder de curar viene dado en un contexto misionero, no para exaltar a las personas que tienen el don sino para confirmar la misión (cf. Mc 16,17-18). Por ejemplo, el don de curación es una manifestación sensible del amor siempre misericordioso y compasivo del Padre de los Cielos, el cual, a través de su Hijo Jesús y con el poder del Espíritu Santo, sana a los pobres y necesitados”, explicaron.
Por otra parte, “el carisma de "oración por liberación" consiste en la súplica dirigida al Señor Jesús para que libere a la persona de las influencias y acechanzas del demonio”. En cuanto a “eI carisma de don de lenguas es fundamentalmente un carisma para glorificar, alabar a Dios”.
“Una acción comunitaria: En el contexto de las reuniones de oración, en un clima de entrega y fe absoluta en Jesús que vive y en su Espíritu que actúa, y en un ambiente de comunión fraterna el que tiene el "carisma de curaciones" no actúa solo; la comunidad lo asiste y acompaña. Se trata de vivir intensamente unidos en la fe, la esperanza y el amor, como hermanos, y en una relación personal con Dios vivo que transforma el corazón y que tiene poder para sanar las almas y los cuerpos. Si se producen sanaciones físicas, es mayor el número de las sanaciones espirituales, interiores y síquicas”, agregaron.
A continuación citan al Papa: “El Papa Francisco señala en el número 130 de su Exhortación Apostólica "Evangelii Gaudium" (EI gozo del Evangelio) lo siguiente: «El Espíritu Santo también enriquece a toda la lglesia evangelizadora con distintos carismas. Son dones para renovar y edificar la lglesia. No son un patrimonio cerrado, entregado a un grupo para que lo custodie; más bien son regalos del Espíritu integrados en el cuerpo eclesial, atraídos hacia el centro que es Cristo, desde donde se encauzan en un impulso evangelizador. Un signo claro de la autenticidad de un carisma es su eclesialidad, su capacidad para integrarse armónicamente en la vida del santo Pueblo fiel de Dios para el bien de todos»".
“Como se dijo anteriormente, la Iglesia acompaña esta comunidad con el asesoramiento de un sacerdote, lo hace desde el inicio de la misma. Hoy, hay un grupo de sacerdotes que acompañan la experiencia. En este momento, dada la magnitud del acontecimiento, se ha dispuesto que cada encuentro comience con la Santa Misa, terminada la misma se haga la adoración al Santísimo Sacramento y la bendición. Luego, se haga la reserva del mismo”, detallaron sobre el modo en que asisten y participan de las ceremonias de cada martes.
“Dada la gran cantidad de personas que concurren se está procurando la asistencia de varios sacerdotes para atender confesiones. De este modo se fortalece la dimensión eclesial de las bendiciones a los enfermos y personas que buscan alivio espiritual a través del servicio que presta la Sra. Leda Bergonzi. Este acompañamiento se manifiesta también en las "Orientaciones Pastorales relativas a la Oración para obtener de Dios la curación"”, señalaron.
Por otra parte, la cúpula eclesiástica se detiene en el tema de las sanaciones. “En caso de que hayan curaciones "se deben recoger con simplicidad y precisión los eventuales testimonios y someter el hecho a la autoridad eclesiástica"”.
Por último, las autoridades religiosas remarcan el apoyo a Leda: “La Iglesia de Rosario acompaña este acontecimiento para que en un adecuado cauce produzca muchos frutos, no solo en curaciones, sino que a través de las mismas, de sanaciones espirituales y otras gracias, las personas glorifiquen a Dios, comiencen ○ profundicen un camino de vida cristiana, especialmente en la oración y en la vivencia de los sacramentos de la confesión y de la Eucaristía, en el que experimenten constantemente la presencia de Cristo; que se integren en las diversas comunidades de fe y oración. En una palabra, que reaviven su vida cristiana, glorifiquen a Dios y vivan un mayor compromiso de amor al prójimo”, finalizan.
Apoyo del arzobispo
Leda y su grupo espiritual han contado siempre con el acompañamiento del arzobispo de Rosario, Eduardo Martin, quien en julio pasado, en medio del crecimiento de la convocatoria, lanzó un comunicado en el que brindaba un marco explicativo al fenómeno de fe, por entonces activo en el oratorio del colegio Sagrado Corazón.
Bajo el título “Orientaciones pastorales relativas a la oración para obtener de Dios la curación”, el texto sostiene a la práctica de la oración como un vehículo para obtener de Dios la curación, e invita a recordar “consideraciones doctrinales que son el espíritu que fundamenta y vivifica las disposiciones vigentes”.
Un fenómeno de fe
Leda Bergonzi encabeza un grupo espiritual "Soplo de Dios Viviente" desde hace 8 años, compartiendo oración y acciones solidarias. En febrero de este año fueron recibidos en la catedral de Rosario, pero en junio tuvieron que retirarse. Por entonces, los alcances de los "carismas" de Leda se hicieron más conocidos y cuando fueron cobijados en la capilla del Sagrado Corazón, la asistencia de personas se había multiplicado de a cientos.
Luego, debido a la creciente convocatoria, mudaron sus ceremonias a la parroquia Inmaculada Concepción, que se vio desbordada de gente durante dos semanas.
Ante esta masiva respuesta de los fieles, la Municipalidad de Rosario ofreció las instalaciones de la ex Rural de Rosario para que Leda pueda realizar sus oraciones cantadas. Se trata de un predio con dimensiones que permiten congregar a los miles de personas que llegan, incluso de países limítrofes para participar de las bendiciones y también para albergar a la prensa que cada martes está más presente.
Más información