Menos de un mes después de que el Pentágono, centro militar de los Estados Unidos, publicara una serie de videos en los que se pueden ver objetos voladores no identificados, la Marina estadounidense le entregó a un portal de noticias del sector automotor una serie de documentos sobre los "encuentros" que registraron los pilotos de esa fuerza entre 2013 y 2019.
The War Zone, la sección especializada en vehículos militares del portal The Drive, publicó esta semana ocho informes que la Marina de los Estados Unidos le entregó a partir de un pedido hecho al Centro de Seguridad Naval en el marco de la ley de acceso a la información pública. Siete de los documentos contienen datos sobre episodios ocurridos entre 2013 y 2014 en el área conocida como "W-72", a la altura de la costa de Virginia y Carolina del Norte.
El octavo documento contiene detalles sobre un encuentro inexplicable ocurrido en 2019 entre un piloto de la Marina estadounidense a bordo de un EA-18G Growler que entró en contacto con un OVNI en el área W-386, delimitada sobre el océano Atlántico a la altura del estado de Maryland.Varios miembros del escuadrón VFA-11, con base en Virginia, en el este de Estados Unidos, declararon haber visto ovnis, que pueden ir desde globos hasta "una aeronave de color blanca y del tamaño de un drone o misil", como describió un piloto en su reporte del 27 de junio de 2013.
El ovni en cuestión no aparece en los videos que fueron desclasificados a fines de abril, y ni siquiera hay registros de él en los radares de la base, pero los pilotos que lo vieron aseguraron que "pasó por la derecha con unos 60 metros de separación" de su avión, y que nadie contestó cuando intentaron establecer comunicación con el aparato.
El 18 de noviembre de 2013 sucedió otro "encuentro" del que no quedaron videos ni rastros en los radares, otra vez en el área W-72, donde otros pilotos del mismo escuadrón divisaron "una aeronave de 1,5 metros de envergadura de color blanco sin otras señas particulares".
Mientras tanto, sobre la superficie del Atlántico había "poco tráfico marítimo" y apenas "una solitaria embarcación con bandera de los Estados Unidos que no fue identificada". El rastro de ese ovni también se perdió.
Para el 27 de abril de 2014 los incidentes habían escalado al punto de que por tercera vez en el lapso de cinco días un tripulante de un F/A-18F del escuadrón VFA-11 reportó un ovni en el área W-72 que tenía forma de "globo" y que casi le provoca una "colisión en el aire".
Casi cinco años más tarde, el 13 de febrero de 2019, la tripulación de un EA-18G Growler divisó lo que describieron como "un globo rojo" de los que se utilizan para medir las variables atmosféricas del clima a más de 8.000 metros de altura. El objeto no aparecía en los registros oficiales. Los pilotos, que eran parte del escuadrón VX-23, jamás supieron quién lanzó ese ovni, según publicó M1.