La tensión no cesaba este jueves en Ecuador, luego de las protestas contra el gobierno del presidente Lenin Moreno que dejaron un muerto ayer en Quito, luego de la brutal represión policial. Los manifestantes de movimientos indígenas, concentrados en la Casa de la Cultura Ecuatoriana, mantenían como rehenes a seis policías ante las advertencias de nuevos arribos de las fuerzas de seguridad para disipar las protestas en el marco de una gran crisis económica.
Según medios ecuatorianos, manifestantes indígenas mantenían hoy en Quito retenidos a al menos seis policías ante la posibilidad de que las fuerzas policiales ataquen esa sede, en medio de la crisis por las masivas protestas contra el ajuste económico ordenado por el gobierno.
"Afuera nos dicen que el gobierno empieza a mandar ya las bombas lacrimógenas, entonces ahora nuestros líderes indígenas no les van a soltar a los policías porque necesitamos un respeto. Si ellos nos agreden, nosotros vamos a aplicar la justicia indígena", dijo a la agencia de noticias EFE Fabián Masabanda, indígena de la provincia de Imbabura.
Masabanda advirtió que si las fuerzas del orden atacan la zona donde se encuentran, la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE), "no nos responsabilizamos de la vida de los policías".
La retención de los agentes se da en momentos en que la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie) se ha declarado "de luto" por la muerte ayer de un manifestante en las protestas, según confirmó la Defensoría del Pueblo. De acuerdo con Masabanda, retuvieron a los policías "porque empezaron a agredir".
"Nosotros venimos en son de paz, pero el gobierno nos ha maltratado cruelmente", aseguró al denunciar que ayer la policía "atacó con bombas lacrimógenas" una zona de la universidad en donde pernoctan desde que llegaron a Quito en el marco de las protestas que estallaron hace una semana por la eliminación del subsidio de los combustibles.
Los indígenas piden que las fuerzas que rodean el parque El Arbolito, junto a esa institución, se alejen para que ellos puedan salir.
Agrupados en la Conaie, una de las organizaciones indígenas más grandes del país, los manifestantes llegaron a Quito a inicios de esta semana para participar en protestas contra la eliminación del subsidio de los combustibles, decretada en el marco de un acuerdo crediticio con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Esa medida derivó en un alza de 1,85 a 2,39 en la gasolina "extra" (la más popular), y de 1,03 a 2,27 en la diesel "premium" y provocó el rechazo de sindicatos, indígenas y grupos sociales que se lanzaron a las calles desde el pasado jueves.
La Defensoría del Pueblo de Ecuador confirmó hoy la muerte de un manifestante durante las protestas de ayer contra el ajuste del gobierno, algo que ya había sido informado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie) en un mensaje en el que repudió la "represión brutal y desmedida" a los manifestantes.
Según la Defensoría, la víctima es un dirigente indígena de la Conaie que falleció por un trauma craneoencefálico durante las multitudinarias protestas, que fueron reprimidas por las fuerzas de seguridad con gran cantidad de gases lacrimógenos.
Con este caso, ascienden a cinco los muertos en las protestas, después de que el fin de semana un hombre muriera atropellado cuando supuestamente escapaba para protegerse de la represión en el sur del país, mientras que otras tres personas fallecieron al "caer" de un puente en Quito.