La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner fue blanco de un intento de magnicidio este jueves por la noche cuando llegaba a su casa del barrio porteño de Recoleta. Un hombre la apuntó con un arma en la cabeza y le gatilló, pero la bala no salió. Fue cuando la ex mandataria de la Nación saludaba a simpatizantes en la entrada de su domicilio. El sospechoso es de origen brasileño y está detenido.
El conmocionante episodio ocurrió este jueves por la noche, poco antes de las 22, cuando Cristina regresaba a su casa de Juncal y Uruguay, donde la esperaba una multitud para mostrarle su apoyo, como estos últimos días.
Entre los militantes, un hombre logró acercarse mucho a la vicepresidenta, sacó un arma, que sería una pistola con cinco balas en la recámara, y le apuntó a centímetros de su cabeza. Rápidamente, la custodia lo apartó ante militantes estupefactos. Cristina, por su parte reaccionó agarrándose la cabeza. No resultó lastimada.
Toda la secuencia quedó filmada por distintas cámaras. E inmediatamente provocó manifestaciones públicas de repudio.
El detenido fue identificado como Fernando André Sabag Montiel, de origen brasileño y de 35 años.
Tenía un antecedente policial de marzo del año pasado, cuando fue detenido en el barrio de Agronomía dentro de un auto sin patente y con una cuchilla de 35 centímetros de largo, informaron hoy fuentes policiales.
La detención se produjo en la avenida San Martín al 2800, cuando un oficial de la fuerza porteña observó estacionado en la vía pública un automóvil Chevrolet Prisma de color negro que no poseía patente trasera. El arma quedó secuestrada y será peritada.
El ataque, sin precedentes en esta etapa de la democracia argentina, mereció el inmediato repudio de ministros, legisladores, encumbrados dirigentes políticos de la oposición y el oficialismo, sindicatos y personalidades de distintos sectores, que pidieron el esclarecimiento del caso.