Comenzó la devolución, a familiares de fallecidos, de placas de bronce que habían sido sustraídas de cementerios de Rosario y recuperadas en diferentes inspecciones.

El secretario de Gestión de Registros Provinciales, Matías Figueroa Escauriza, encabezó la entrega luego de que la Agencia Provincial de Registro, Administración y Destino de Bienes y Derechos Patrimoniales (Aprad) lanzara una convocatoria para que las familias víctimas de este tipo de ilícitos pudieran recuperar las placas que recuerdan a sus seres queridos.

Queda mucho material por devolver. Quienes hayan resultado damnificados pueden contactarse al celular 341-276-0123.

La primera entrega de la tanda recuperada.

Es a partir de varios operativos de control a chatarrerías, locales de venta de autopartes y desarmaderos, con el objetivo de prevenir la sustracción de materiales, cables y placas de bronce o cobre.

Figueroa Escauriza recordó que “se comenzó a encontrar gran cantidad de placas de cementerio y se abrió esta convocatoria para que no queden en depósitos tiradas, sino que vuelvan, por una cuestión sentimental, a cada familia”.

En la semana pasada se comenzaron a entregar las primeras placas a seis familias de Rosario que han podido identificar a sus parientes. “Se pudo verificar la identidad de las personas con las cuales recuperaban estas placas”, agregó.

Se encontraron muchísimas placas de tumbas de personas fallecidas, y es por eso que el funcionario instó a que “familiares llamen y otorguen los datos de la persona que perdió la placa y, en la base de datos se cruzará la información y devolver la placa lo más rápido posible”.

Noemí fue la primera persona a la que le fue restituida la placa de su papá que hacía mucho tiempo que había sido sustraída de su tumba. Ella destacó emocionada: “Hacía un año que la habían hurtado del cementerio Granadero Baigorria, entonces es algo muy emotivo y tengo que agradecer la atención que he tenido y la alegría, porque dentro de toda la angustia que uno tiene en el alma de ver sin placa la sepultura, tuvimos la satisfacción de poder recuperarla”.

Manifestó su agradecimiento por la restitución y aclaró: “No la voy a colocar a la misma porque está rota, pero sí emocionalmente te toca la fibra más íntima, que es la foto de tu papá, que no podés dejarla que esté de mano en mano”.