El Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°1 de Rosario sentenció a los 16 acusados de la causa por delitos de lesa humanidad Guerrieri IV “a cadena perpetua con cárcel común y efectiva”.
La lectura del fallo se dio este lunes pasado el mediodía en los Tribunales Federales de bulevar Oroño al 900, con presencia de organismos de derechos humanos en la calle que celebraron la sentencia.
“Es un día de mucha emoción y sensaciones encontradas porque tuvimos una nueva sentencia por delitos de lesa humanidad”, afirmó a Radio 2 Tomás Labrador, de Hijos Rosario.
“No podemos olvidarnos que llegar a los juicios fue una lucha de muchos años que se inició durante la misma dictadura y poder llegar a estos días de justicia es un día de alegría”, agregó.
Por otro lado, remarcó que la sentencia con 16 cadenas perpetuas “es importante cuando los discursos negacionistas tienen un poco más de lugar y responder de esta manera con juicios donde los acusados tuvieron todas las garantías”.
"Se hizo justicia, todos los acusados de la causa Guerrieri IV recibieron condena a perpetua en cárcel común. Los juzga un tribunal los condenamos todxs", celebró Hijos Rosario.
Se hizo justicia todos los acusados de la causa Guerrieri IV recibieron condena a perpetua en cárcel común. Los juzga un tribunal los condenamos todxs. pic.twitter.com/NbUbtkW7Ak
— H.I.J.O.S. Rosario (@HIJOSRosario) August 28, 2023
La lucha, paga. Gracias a la ardua pelea de organismos, familiares e hijos de desaparecidos que declararon, se lograron todas cadenas perpetuas a los genocidas en la causa Guerrieri IV en Rosario. Una gran alegría. La salida es en las calles. pic.twitter.com/h7whKnLqZA
— Octavio Crivaro (@OctavioCrivaro) August 28, 2023
Perpetua para todos los represores juzgados en la causa #GuerrieriIV q investiga la desaparición d Susana y Graciela Busaniche, entre otros. Después d 46 años llegó la justicia, Tías! Presentes! Seguimos reclamando verdad, sus cuerpos y, si nació, el hijo de la Tía Graciela✊
— Gisela Busaniche (@gisebu) August 28, 2023
El juicio estuvo a cargo del Tribunal Oral integrado por Carlos Julio Lascano, María Noel Costa y Mariela Emilce Rojas. Intervino la Unidad de Derechos Humanos de Rosario, a cargo del fiscal general Adolfo Villatte.
Se trata de un proceso iniciado el 1° de agosto de 2022 que aborda los crímenes cometidos contra 116 víctimas de Rosario, Funes y Granadero Baigorria, por los que llegaron a juicio 16 exmilitares y expolicías imputados del delito internacional de genocidio, comprensivos de, entre otros, aplicación de tormentos, privación ilegal de la libertad, desaparición forzada, homicidios y asociación ilícita.
Entre ellos, Eduardo Garat que fue secuestrado el 13 de abril de 1978 en España y Santa Fe y recién este año hizo la audiencia judicial con sus familiares. Se dio en el marco de este juicio que los hijos del desaparecido declararon por primera vez 45 años después. Una muestra del largo camino de los familiares en busca de Memoria, Verdad y Justica.
Los hechos
De acuerdo con la acusación fiscal, el plan represivo implementado por el Destacamento de Inteligencia 121 tuvo como epicentro los centros clandestinos de detención (CCD) La Calamita, Quinta de Funes, Escuela Magnasco y la casa quinta La Intermedia, así como también la Fábrica Militar. En aquellos lugares se mantuvo a las víctimas en cautiverio de modo ilegítimo, “sometidos a un régimen de vida incompatible con la dignidad humana y al padecimiento de tormentos tanto físicos como psíquicos, de los cuales algunos pocos recuperaron la libertad y otros fueron asesinados durante sus cautiverios, ocultándose, por parte de sus perpetradores, tanto tales acontecimientos como el destino de sus restos mortales”. Además, en las audiencias se conocieron los casos del cura tercermundista Santiago Mac Guire y de Roberto Pistacchia y Eduardo Garat, quienes compartieron cautiverio en un predio de la Casa Salesiana “Ceferino Namuncurá” de la localidad de Funes, identificada por las víctimas. En este juicio es la primera vez que se analizó lo que ocurrió en el predio perteneciente a la Iglesia Católica y que funcionó como centro clandestino de detención del Ejército en Funes.