La ministra de Seguridad de la Nación Patricia Bullrich destacó la pronunciada baja de homicidios y balaceras en lo que va del año en el departamento Rosario y afirmó que "hay una caída fuerte en el flujo de la cocaína" en la ciudad. Agregó que las operaciones ordenadas desde prisión fueron reducidas "al máximo".
En primer término, Bullrich señaló que al comienzo de la gestión buscaban que "el fenómeno Rosario" no se extendiera a otras partes del país. "En Río Cuarto, en San Nicolás, estaban preocupados porque el fenómeno iba a ir a otros lugares. Hemos logrado el control territorial, el encapsulamiento del problema. Las bandas no fueron a otros lugares. Trabajamos fuerte para retomar el control territorial; que la ley y la Constitución estén por encima de la ley narco que había", enfatizó.
"La baja del 70 por ciento en las zonas más conflictivas marcan un número inédito. El gobernador me marcaba que los números son los más importantes de los últimos 17 años. Nunca hubo un número tan bajo en homicidios y balaceras. La Policía está desplegada por toda la ciudad, tiene manejo del 911 y las fuerzas federales tienen una responsabilidad en los barrios donde había mayor incidencia de las bandas", amplió.
La ministra subrayó que las actuales estadísticas criminales impactan en "una importante mejora" en Rosario. "La vive los rosarinos, en su economía, en la vida. Estas vacaciones de invierno fueron las mejores de los últimos diez años, con una ocupación hotelera del 70 por ciento", apuntó.
"Recuerdo el fin de semana que vinimos después del asesinato de cuatro ciudadanos y no se veía a nadie en la calle. La gente tenía desesperación. Logramos mantenernos en lo que hacíamos. El objetivo era no presionar tanto en el alto riesgo", manifestó.
Para la titular de Seguridad nacional, los principales jefes de las bandas narco "están aislados e incomunicados. La operación desde el interior de la cárcel no podemos decir que está terminada, pero está reducida al máximo".
"Incrementamos un 500 por ciento las incautaciones de cocaína respecto del mismo período del año pasado en Rosario. Hay una caída fuerte en el flujo de la cocaína. Además, se arrestaron a 555 personas por narcotráfico por las fuerzas federales, que están todas vinculadas a las organizaciones. Son las llamadas segundas o terceras líneas", aseguró.
