Un bebé estuvo al borde de la muerte en España, luego de intoxicarse con una pastilla de éxtasis que encontró en un parque de la ciudad de Getafe. La madre del chiquito de 11 meses, de nombre Dee, observó cuando su hijo se metía algo en la boca y, pese a que no sabía de qué se trataba, lo llevó hasta un hospital cercano.

Los médicos que lo recibieron afirmaron que la droga ya había empezado a hacer efecto, por lo que la criatura estaba rígida. Según el parte, presentaba "un episodio de desconexión del medio, rigidez generalizada y revulsión ocular", según publicó Crónica.con.ar.

Para salvarle la vida, los profesionales le colocaron un drenaje urinario y le aplicaron una medicación intravenosa. Después de tres días internado, el bebé fue dado de alta y pudo volver con su familia, oriunda de Rumania, sin presentar ninguna secuela.

Ahora, los padres del nene enfrentan una batalla legal para evitar que los incriminen por lo sucedido, ya que intervinieron los servicios sociales, destacaron su origen extranjero y, entre otras cosas, los sometieron a un análisis toxicológico para comprobar si eran adictos.