El rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Franco Bartolacci, analizó el escenario que se abre tras la ratificación del veto presidencial a la ley de Financiamiento Universitario que logró el gobierno con el voto de 84 diputados. Mientras lamentó que legisladores que se formaron en la universidad pública hayan votado contra el incremento de los fondos para la educación superior, aseguró que seguirá peleando por mayores recuersos en el Presupuesto 2025 porque de lo contrario “el que año que viene será más difícil aún”.
“Es inexplicable que gente que se formó en la universidad pública, que pudo ser profesional por la universidad pública argentina, tome posiciones como la que se tomaron en el Congreso de la Nación. Espero que logremos conmover a quienes no entienden la gravedad del problema. Hay intereses que exceden la discusión respecto de la educación pública. Hay que estar atentos a lo que suceda con designaciones las próximas semanas que explicarán por qué algunos bloques tomaron la posición que tomaron”, manifestó Bartolacci en diálogo con el programa Punto Medio (Radio 2).
El rector de la UNR además agradeció a “la sociedad argentina el acompañamiento conmovedor a lo largo del año y a los legisladores que defendieron la causa de la universidad” en la sesión de este miércoles porque "sin la marcha de abril no se hubiese conseguido el aumento de gastos de funcionamiento" y sin el acompañamiento de la semana pasada no se hubiese modificado la garantía salarial y el “escaso e insuficiente” aumento anunciado esta semana.
“Aún con esta situación difícil, seguimos dando pasos. Esto no termina con la discusión del veto, vamos a seguir peleando con la misma racionalidad y con la misma firmeza. Vamos a pelear en el Congreso para que se modifique el Presupuesto 2025 porque si eso no sucediera, va a ser muy difícil”, dijo el rector de la UNR.
Por otra parte, Bartolacci ratificó que los gremios nacionales lanzaron un paro que se cumplirá en la UNR como en el resto de las universidades del país.
Aseguró que el responsable de esa medida de fuerza es “el presidente de la Nación que tenía en sus manos la posibilidad de promulgar una ley que solucionaba el problema universitario sin que se comprometa los números del Estado” y de los legisladores que votaron a favor del veto.