En un tenso y particular contexto, se llevó a cabo la primera jornada del juicio contra Ariel Máximo "Guille" Cantero, líder de Los Monos, y parte de su banda por balaceras de 2018 dirigidas a domicilios de jueces, de policías que investigaron a la organización narco y edificios judiciales. La audiencia entró en un ambiente espeso después de la declaración del capo narco previa a los alegatos de apertura, que afirmó tener como "oficio" el "contratar sicarios para tirar tiros a jueces judiciales (sic)". La situación se caldeó aún más cuando después intentó interrumpir a un fiscal para referirse al crimen que dio origen a la famosa "Megacausa". Tras la alocución de uno de los acusadores quedó flotando una pregunta en el aire: ¿qué pasó con los bienes decomisados a esa estructura criminal?

La investigación tuvo a once personas imputadas, de las que solo siete llegaron a este juicio, ya que las cuatro restantes aceptaron procedimientos abreviados y ya están condenadas. El debate oral y público que empezó este viernes se presume que terminará el 16 de septiembre después de que desfilen unos 80 testigos. 

En total, se van a juzgar 14 balaceras, de las cuales una no tiene relación con el Poder Judicial y habría sido ordenada por la imputada Lucía Uberti para exigir plata a una persona por una deuda por droga; y otras dos que fueron hacia domicilios vinculados a Ariel Lotito y Luis Quevertoque, policías que trabajaron en la División Judiciales de la Unidad Regional II, participaron en la investigación a Los Monos y declararon luego en el juicio.

El juicio a Los Monos por balaceras se desarrolló este viernes (Alan Monzón/Rosario3)

El fiscal Miguel Moreno, uno de los cuatro integrantes de la parte acusatoria, con micrófono en mano y parado frente al tribunal y los defensores como un docente, ligó las balaceras en cuestión con el crimen de Martín "Fantasma" Paz ocurrido el 8 de septiembre de 2012, que dio inicio a la denominada "Megacausa Los Monos". El homicidio de Paz –en ese momento, cuñado del Pájaro Cantero– no fue esclarecido, pero sí permitió al por entonces juez de instrucción Juan Carlos Vienna avanzar contra la organización que podría estar detrás del asesinato. 

En un momento, el fiscal aseveró que la hipótesis del asesinato de Paz habría sido una "traición a la organización (Los Monos). En ese preciso instante, "Guille" Cantero levantó la mano y pidió la palabra a través de videoconferencia desde el penal federal de Marcos Paz. Esa interrupción desconcertó por un momento al fiscal, que luego retomó la palabra y continuó.

En su alocución, Moreno recordó que "Guille" Cantero recibió 22 años de prisión en ese juicio –con pena confirmada en segunda instancia– por asociación ilícita y por el asesinato de Diego "Tarta" Demarre, dueño del boliche de Villa Gobernador Gálvez frente al que fue acribillado Claudio "Pájaro" Cantero, por entonces jefe de la banda.

El fiscal subrayó que dos de los tres jueces de primera instancia del juicio contra Los Monos fueron víctimas de balaceras después de que se decidiera trasladar a "Guille" Cantero a un penal federal en el marco de la causa por narcotráfico llamada "Los Patrones", cuestión que fue notificada al tribunal del juicio provincial luego de un hábeas corpus rechazado por la Justicia Federal. 

Los primeros dos atentados los sufrió Ismael Manfrin, cuando dispararon el 29 de mayo de 2019 en Montevideo al 1000 y en Italia al 2100, inmuebles que ya no habitaba el presidente del tribunal que condenó a la organización criminal.

Ariel Cantero fue trasladado al penal federal de Resistencia, Chaco, el 30 de mayo, al día siguiente de los ataques.

La saga continuó con "Guille" trasladado. El tercer atentado fue el 30 de junio en Braile al 1400, domicilio del policía Ariel Lotito y continuó el 1 de julio en Gálvez al 5900, vinculado al policía Luis Quevertoque.

El 13 de julio, los custodios del padre del juez Vienna fueron atacados a tiros en Laprida al 3600. 

El 26 de julio comenzó otra seguidilla que tuvo como objetivo más frecuente a la jueza Marisol Usandizaga. Fueron cuatro los ataques en su contra: Zeballos al 2500 (26 de julio de 2018), Dorrego al 1600 (27 de julio de 2018), Libertad al 300 (4 de agosto 2018) y en Buenos Aires al 1700 (10 de agosto de 2018), también en domicilios en los que ya no vivía.

El fiscal Moreno, siguiendo una línea cronológica, explicó que también fueron atacadas casas en las que vivieron dos juezas que habían sido designadas el 24 de julio de 2018 como integrantes del tribunal de segunda instancia, cuerpo que debía revisar las condenas a Los Monos. Los ataques en esos casos fueron el 13 de agosto de 2018 en San Luis al 1400, vinculado a la magistrada Gabriela Sansó; y el 5 de agosto de 2018 en Tarragona al 700 bis, relacionado a Carolina Hernández.

Otros dos ataques fueron a edificios judiciales: el 4 de agosto de 2018 al Centro de Justicia Penal y el 14 de agosto a la sede de Fiscalía de Montevideo al 1900. El último hecho ocurrió el 26 de agosto, cuando arrojaron a la sede de la ex Policía de Investigaciones de Lamadrid al 500 bis una granada de gas lacrimógeno.

Los celulares que permitieron avanzar

Cuando ocurrió el atentado contra la sede de Fiscalía el 14 de agosto de 2018, hubo una persecución policial que terminó con un tiroteo y personas aprehendidas. Entre ellas, José Alberto Castillo, cuyo celular posibilitó a los fiscales encontrar vínculos con quienes le habían encargado el trabajo. Allí fue que se empezó a investigar a Leonel Fernández –otro de los imputados–, su hermano Matías, y su relación con la presunta instigadora: Lucía Estefanía Uberti.

Uberti fue detenida el 11 de noviembre de 2019 en allanamientos hechos en Winter al 3800 y en Pasaje Lett al 4200. Cayó junto a Matías César. Los celulares de ambos condujeron la causa a Ariel Máximo "Guille" Cantero, Daniel "Teletubi" Delgado, Leandro "Chulo" Olivera, Claudio Canavo, Aldana Mazzeo y Damián Chávez. 

Guille Cantero estuvo conectado por videoconferencia (Alan Monzón/Rosario3)

De esta forma, la investigación tuvo un panorama claro sobre la estructura en la toma de decisiones: Guille Cantero, Lucía Uberti, Daniel Delgado y Matías César como quienes planificaron los ataques; el resto, como ejecutores de los atentados.

Una pregunta en el aire

En el alegato de apertura, el fiscal Moreno consideró que los atentados buscaron afectar las decisiones de los jueces. Y sugirió que si bien balearon las casas de los jueces que ya los habían condenado, esos magistrados aún no habían tomado determinación alguna sobre el decomiso de los bienes de esa banda narco.

La situación abrió el interrogante sobre qué hizo el Estado y la Justicia desde aquel fallo judicial contra Los Monos por asociación ilícita y homicidios que había determinado el decomiso de los bienes de la banda, entre los que se encuentran inmuebles y vehículos. 

Las condenas

En la investigación ya hubo cuatro condenados. El primero fue Claudio Canavo, que recibió una pena de 17 años por un juicio abreviado por participación en las balaceras y por un homicidio ocurrido en 2018.

José Alberto Castillo, Tobías Barrios y Aldana Mazzeo también fueron condenados, todos a través de procedimientos abreviados.

Castillo recibió 5 años y 6 meses; Barrios recibió 5 años y 6 meses; y Mazzeo 3 años.