Todo comienza en España, con la actriz Vivy Lin, que mediante las redes sociales viralizó una leyenda donde las personas van al supermercado a conocer gente. La dinámica que propuso consistía en que, entre las 19 y las 20, los interesados pasearan por el supermercado con una piña en el carrito y, al encontrar a alguien que les parezca atractivo, chocaran para iniciar una conversación.
Desde ese momento, esta tendencia está siendo furor en todo el mundo y cada vez más personas lo implementan y comentan en redes sociales su experiencia. En este contexto, Nicolás relató en sus redes sociales que conoció a una joven que tuvo una experiencia romántica entre las góndolas de La Gallega, la cual culminó de manera positiva. Si bien, las historias del Mercadona se relacionan con una piña, en este caso, la protagonista de la historia fue una pizzeta.
Los españoles nos versearon. Lo del Tinder del supermercado se inventó en Rosario. Una amiga de mi mujer lo hizo en mayo de 2024 en La Gallega de Oroño. Si, se levantó un flaco entre las góndolas usando una pizzeta. 50 likes y les cuento la historia. pic.twitter.com/0QgQX9QYC3
— Nicolás Maggi (@nicolasmaggi87) September 25, 2024
Además, Nicolás destacó que un elemento fundamental de esta movida radica en los productos que cada persona lleva en su carrito, ya que las elecciones de productos pueden revelar características de la persona. En este caso, él llevaba consigo jamón crudo y una pizzeta simple, mientras que ella tenía un vino y otra pizzeta simple. Al cruzarse y chocarse, se inicia la conversación entre ambos. A medida que intercambian palabras, él decide reemplazar las pizzetas simples por una de mayor tamaño, y juntos se dirigen a la caja para compartir una cena.
La historia que cuenta Nicolás es un gran ejemplo de cómo algo tan simple como ir al supermercado puede convertirse en una oportunidad para conocer a alguien nuevo. Esta movida, que comenzó en España, está ganando popularidad en todo el mundo y demuestra que, a veces, el amor puede surgir en los lugares más inesperados.
Así que, ¿quién sabe? La próxima vez que vayas a La Gallega no te olvides de agregar una pizzeta a tu carrito para encontrar a alguien especial.