La Diplomatura de pregrado “Prácticas alfabetizadoras en programas de alfabetización no formal” de UNR se dictó desde el Centro de Estudios Interdisciplinarios con una fuerte articulación del Área de Extensión y Territorio. La misma apunta a desarrollar prácticas alfabetizadoras desde el valor de espacios y saberes culturales.

La coordinación académica estuvo a cargo Mónica Báez y contó con un equipo interdisciplinario de docentes. Las prácticas, esenciales para este espacio de formación tuvieron lugar en el Grupo Madre Teresa Lourdes, donde cotidianamente asisten personas en situación de calle para realizar actividades de capacitación y contención. En dicha institución hubo una participación semanal de más de 20 adultos. Asimismo se comenzó a desarrollar un espacio de alfabetización en la asociación Casa de Todos del barrio San Francisquito.

“Ambas experiencias son altamente significativas, tanto en la inclusión socioeducativa de adultas y adultos de sectores populares como en la ampliación de los horizontes formativos de quienes cursan la diplomatura”, expresaron desde el área de Extensión.

“Pensamos cómo podíamos hacer un aporte para dignificar la vida a todos aquellos que no tuvieron la posibilidad de llegar a la Universidad”, afirmó el secretario de Extensión Santiago Dearma y agregó: “Esperamos que haya servido para transformar un poquito a cada persona. Es un compromiso de nuestra Universidad colaborar para que sea una propuesta multiplicadora”.

Prácticas alfabetizadoras : Un regalo para la UNR

“En el día del cumpleaños 54 de la UNR, podemos señalar con orgullo que se provocó uno de los procesos de expansión más importantes de la historia de esta Universidad”, dijo el Rector Franco Bartolacci y resaltó: “Hay uno en particular que más me satisface porque cumple con la misión de la Universidad que es que deje de ser un palacio de saberes clausurados, que podamos dar vuelta la Universidad Pública y ponerla de cara a los problemas que tiene la ciudad de Rosario y la región. Que en todos los temas que son preocupación genuina de la sociedad, la Universidad pueda hacer un aporte”.

“Poder entregar estos diplomas es un regalo que recibimos”, afirmó y agradeció la confianza a las organizaciones con las que se puso en marcha este dispositivo. “No somos una institución que sólo acredita formación de excelencia a través de las carreras tradicionales y sus correspondientes certificados, somos consecuencia del esfuerzo colectivo que hace la sociedad para sostener con muchos recursos todo lo que sucede en la Universidad Pública” y destacó: “Lo que reivindicamos como un derecho es un privilegio que implica una enorme responsabilidad y estamos dispuestos a asumirla”.

Fuente:UNR