El coronavirus encontró a algunas escuelas más preparadas que otras para poder impartir clases virtuales. Si bien la tecnología, las computadoras, las plataformas educativas y un programa acorde son imprescindibles para esta metodología de enseñanza, no menos importante es contar brindar un acompañamiento emocional al alumno.
“Lo más importante para conseguir que la formación a distancia funcione es el acompañamiento emocional al alumnado, que es una de las señas de identidad más importantes”, aseveró Sandra Esquillor, directora del colegio La Concepción de Zaragoza, España, distinguido por ser pionero en la educación a distancia.
Para prepararse, desde hace cuatro años trabajan con expertos en TICs. A día de hoy “la experiencia está siendo muy satisfactoria y el porcentaje de contacto con las familias y el alumnado es muy elevado, hablamos de más de un 95%”, dijo la directora y consignó el diario La Razón de España.
¿Se adquieren los mismos conocimientos de manera presencial que online? Para Esquillor todo depende de la edad del alumnado. “En los cursos de 5º de Educación Primaria en adelante es más factible que esta situación se pueda dar, debido al nivel de autonomía que ya se suele tener a estas edades. Nosotros damos clases online a través de videoconferencia, interactuando con el alumnado a tiempo real y solventándoles las dudas como si de una clase convencional se tratara”, señaló.
Para ello, los alumnos desde los tres años y sus familias pueden acceder a una plataforma educativa digital en la que no solo se imparten las clases y ofrece material didáctico, sino que además permite mantener una comunicación con el profesorado y el centro educativo, brinda información sobre el rendimiento escolar y sobre las actividades que se realizan en el aula así como tareas escolares.
Esto facilita la actualización del material educativo, la adaptación del contenido de forma permanente de acuerdo a los criterios del profesor y la realización de proyectos interdisciplinares. “Cuando los alumnos entran a la plataforma tienen su propio libro, en el que el profesor ha adaptado tanto los contenidos como las actividades en el momento que es necesario y esto es una gran ventaja para abordar la diversidad del aula. Las videoconferencias suponen también otra herramienta importante porque permite que nuestros alumnos nos sientan cercanos, aunque no vengan a clase”, cerró la directora.