Uno de los hijos del Trinche Carlovich afirmó este lunes que "no estaba programado" el cortejo fúnebre que se llevó a cabo el pasado sábado en el Gabino Sosa, estadio de Central Córdoba. Desde Fiscalía ordenaron medidas para establecer si se incumplió el aislamiento social, preventivo y obligatorio en la cancha, donde se despidió a la leyenda del fútbol, asesinada en un bestial robo.
"Surgió en el velorio a puerta cerrada. Me preguntaron si podía pasar por la cancha. Cuando íbamos llegando se sumó mucha gente a la caravana. Fue gente que fue porque fue. Pasamos tres minutos y nos fuimos", comentó Bruno Carlovich en el programa A Diario (Radio 2).
El hijo del Trinche aseguró que la familia no actuó "de mala fe. Surgió así, no lo tendríamos que haber hecho, pero estábamos mal y no fue algo pensado ni programado".
Por su parte, Fiscalía el sábado pasado pidió a la Policía de Rosario que informe si estaba al tanto de la organización del cortejo fúnebre en plena cuarentena por la pandemia del coronavirus. Esa petición fue respondida desde la Unidad Regional II, donde se indicó que se desconocía.
En ese marco, desde la unidad fiscal especial covid-19 se solicitó a la Agencia de Investigación Criminal (AIC) medidas para determinar cómo se organizó, si fue espontáneo y quién decidió abrir el estadio Gabino Sosa para la realización del cortejo fúnebre.
