Rosario Central y Boca jugarán por los cuartos de final de la Copa Argentina, en la que muchas voces ya llaman la gran revancha del inolvidable 2 a 0 con el que se resolvió, en favor del Xeneize y gracias a la vergonzosa actuación del árbitro Ceballos, la final del mismo torneo del año pasado.

Y el partido ya despertó polémica incluso antes de disputarse, ya que la fecha tentativa para dicho cotejo (el miércoles 26 de octubre) alterará los planes de Eduardo Coudet, puesto que apenas tres días antes, el domingo 23, tendrá que afrontar nada menos que el clásico de la ciudad ante Newell's.

La idea del Chacho es lograr que el encuentro se lleve a cabo antes del derby con los leprosos, ya que considera que el 26 estaría dando ventajas: su intención, que defienden los dirigentes, es adelantar el duelo de cuartos de final ante Boca para el miércoles 19.

"Hoy el rumor está instalado en que se jugará esa fecha (el 26) y consideramos que es una desventaja deportiva porque tres días antes se jugará el clásico, que tiene un plus de desgaste tanto físico como emocional", dijo Ricardo Carloni , vicepresidente de Central, en Zapping Sport.

Según el dirigente, "le hemos manifestado a los organizadores de la Copa Argentina que Central no puede jugar en esa fecha. Le dimos la alternativa de jugar cualquier otra semana, incluso el miércoles 19 podría ser".

Finalmente, tiró: "Cuando Boca pide un cambio se lo dan, y a veces otros clubes pedimos lo mismo y no lo otorgan. Los otros clubes también tienen derecho".