El brillo y el glamour vuelven a convertirse en protagonistas y, junto a ellos, el llamado make up holográfico. El mismo puede llevarse en distintas tonalidades acompañando (o no) el color predominante de las prendas que se vistan.
A diferencia de 2010, las nuevas temporadas invitan a jugar con distintos colores sin necesidad de una combinación exacta o un símil total look, por lo que el maquillaje puede ser de otra tonalidad, o bien, de colores completamente diferentes a los elegidos para el look.
Una de las celebridades que volvió a traer esta tendencia es la famosa cantante Lizzo. "Ella brilla donde quiera que va", escribió su estilista para mostrar los tonos marrones del make up acompañados por brillos holográficos que, según como se miren, pueden verse en distintos colores. En este caso, rojo, dorado, naranja y verde.
Además de labios y delineados o sombras en los ojos, este tipo de make up puede trasladarse a las uñas. En el caso de Lizzo, la manicure Eri Ishizu utilizó una base gris con purpurina plateada.