La primavera trae consigo un sinfín de novedades, entre ellas las nuevas tonalidades que comenzarán a verse acompañando los días más largos y cálidos. Al igual que en temporadas anteriores, los pasteles serán los grandes protagonistas y los vestidos son la prenda ideal para lucirlos. Una tendencia cuyo auge comenzó a mediados de la década del '90 y hoy se recupera desde la nostalgia y el "en la moda todo vuelve".
Con un toque romántico, los colores favoritos rondan entre el rosa caramelo, verde menta y amarillo manteca, pudiendo combinarse con un calzado y accesorios del mismo estilo. Según las y los expertos, existen algunas recomendaciones para crear un outfit primaveral con estos elementos:
-Buscar la armocromía: Se trata de la elección de colores para realzar la imagen, por lo que se recomienda buscar el color ideal en tono pastel para cada persona. Generalmente, en primavera se buscan colores como el azul o verde claros.
-Azul pastel: Tal como lo recomienda la armocromía, es el tono ideal de la primavera. Puede usarse en distintos matices, priorizando que se trate de tonalidades pasteles.
-Amarillo pastel: Si bien es el ideal para el otoño, es un color muy versátil que incluso puede combinarse con otros colores pasteles en accesorios y calzado.
-Verde pastel: Al igual que el azul, es el favorito para la primavera. Ayuda a reslatar bronceados o la tez canela.