La 75° edición de los premios Globos de Oro fue una ceremonia histórica gracias a su dress code que invitaba a concurrir vestido de negro. ¿El motivo? La comunidad artística dejó de lado el glamour y se vistió de negro para protestar contra los abusos sexuales que muchísimas famosas han sufrido en Hollywood.
De esta manera, las actrices y actores dijeron "basta" al abuso de poder y el acoso laboral. Como parte de una campaña para visibilizar esta problemática, algunos famosos llevaban pines en sus vestidos o trajes con la leyendas Me Too (Yo También) y Time's Up (Se acabó el tiempo), una iniciativa impulsada por Reese Witherspoon, Alyssa Milano, Maggie Gyllenhaal y otras artistas, que recaudan fondos para ayudar a mujeres y hombres que han sido sexualmente hostigados, agredidos o abusados en sus trabajos, según Infobae.
Si bien la gran mayoría decidió sumarse a la campaña, hubo quienes por diferentes motivos, prefirieron vestir otros colores.