Desde hace algunas temporadas, el lila en sus distintas tonalidades comenzó a tomar protagonismo hasta convertirse en una especie de comodín. Tras la Semana de la Moda en Nueva York, es posible afirmar que se trata de una de las principales apuestas para la nueva temporada, extendiéndose incluso hasta 2022.
Gran parte de las firmas que presentaron sus colecciones, hicieron girar sus propuestas en torno a este color, ubicándolo como uno de los protagonistas de la pasarela.
Abrigos, vestidos, faldas, shorts, buzos e incluso total looks, son algunas de las opciones que más se visualizaron en este color, jugando a su vez entre lo liso, o distintos estampados y texturas.
Por otro lado, cada alternativa contó con los últimos detalles en el mundo de la moda: acompañamientos metalizados, prendas oversize, cortes rectos, entre otros.