Maquillarse en días de calor implica otro tipo de aplicaciones. No sólo a raíz de la necesidad de fijar más el producto por la combinación con la posible transpiración, sino que, además, con el rostro más bronceado, también deben tenerse en cuenta las variabilidades del color.
¿De qué forma garantizar una mejor aplicación para una óptima duración? 7 ideas clave para resolver esta pregunta:
- Comenzar con brocha y continuar con dedos:
Uno de los consejos más habituales es el de utilizar las propias yemas de los dedos para una aplicación más homogénea de los productos. En esta ocasión, se recomienda que se coloque la mayor parte a través de una brocha, y realizar las terminaciones pertinentes con los dedos haciendo "toquecitos" o "golpecitos" que ayudarán a que se fije más el producto.
- Elegir el spray por sobre los polvos compactos:
Si bien hay polvos compactos sumamente ligeros, los spray fijadores suelen tener mejor resultado en días de mayor humedad y calor.
- Optar por protector solar con color:
Dos pasos en uno. La protección, que se recomienda que sea superior a 30 fps, viene en muchos casos con distintos colores para los diversos tonos de piel, así como en variadas presentaciones según la comodidad de quien se lo vaya a aplicar.
- Prebase: una gran aliada en su justa medida:
Muchas veces, el querer lograr un maquillaje perfecto hace que se excedan las cantidades de lo que se está aplicando. Un caso muy frecuente es el de la prebase, por lo que es importante recordar que debe colocarse una capa muy fina y, en este aspecto, hacerlo únicamente en aquellas zonas que se deseen tapar. Otra idea es mezclar esta prebase con la base de maquillaje, obteniendo como resultado una prebase iluminadora que quedará muy bien también.
- Usar el maquillaje únicamente en zonas con imperfecciones:
En línea con la tendencia de fomentar lo natural, este truco hace que únicamente se tape aquello que rompe con la homogeneidad de un mismo tono, sin necesidad de aplicar maquillaje en todo el rostro y cuello. Esto hace que se aproveche el bronceado que el sol de primavera y verano otorgan, y sólo se utilice el maquillaje en función correctora. Para aplicar, es necesario hacerlo desde adentro hacia afuera.
- Utilizar esponja húmeda:
Es un tip muy recurrente para que el producto no se absorba de golpe, garantizando su durabilidad también respecto de la cantidad del mismo.
- No olvidar la rutina de limpieza:
Cuidar la piel es necesario durante todo el año, aunque los días más calurosos son los que más atención imprimen en este aspecto. Para una correcta rutina de limpieza, será muy importante consultar a un experto o experta que indique cuál es la mejor opción para el propio tipo de piel.