El sistema Brainomix e-Stroke, desarrollado por una empresa con sede en Oxford, permite disminuir en más de una hora el diagnóstico y escoger más rápidamente el tratamiento más adecuado, informó la agencia de noticias AFP.
El uso del sistema en 110.000 probables casos de ACV sirvió para aumentar el porcentaje de pacientes que no sufrieron secuela alguna o un porcentaje menor, de entre el 16% y el 48%.
La inteligencia artificial ayuda en la toma de decisiones a la hora de interpretar los escáneres del cerebro y así permitir que los pacientes "reciban el tratamiento adecuado, en el buen lugar y en el buen momento", destaca la información del Ministerio británico.
Más de 85.000 personas sufren anualmente un derrame cerebral en Inglaterra.
"Cada minuto ganado durante la evaluación inicial en el hospital de la gente que presenta síntomas de ACV permite aumentar de manera espectacular las posibilidades que un paciente salga con un buen estado de salud", destaca en un comunicado el doctor Thimothy Ferris, director de la Transformación del sistema público de salud, NHS England.
El Ministerio de Salud pone como ejemplo el caso de Carol Wilson, que en junio de 2021 sufrió intensos calambres musculares y perdió rápidamente la visión. Un programa de inteligencia artificial permitió diagnosticarle un coágulo de sangre en el cerebro y optar por una trombectomía, lo que le permitió recuperarse sin secuelas.
"Pude sentarme y enviar mensajes a mi familia el mismo día y volver a mi casa y andar de nuevo dos días después de haber sufrido un AVC", recuerda Wilson.
"La inteligencia artificial tiene el potencial de transformar nuestro sistema de salud y permitir diagnósticos más rápidos y precisos para garantizar el mejor tratamiento a los pacientes", asegura el ministro de Salud, Steve Barclay, sobre uno de los diagnósticos médicos más delicados, concluyó AFP.