Las partículas que se desprenden de las agujas al desgastarse durante la realización de un tatuaje llegan hasta hasta los ganglios y pueden producir alergias, ya que contienen metálicos alergénicos como el níquel y el cromo.
El número de personas tatuadas ha aumentado sustancialmente en los últimos años, y algunos países han revelado que tienen hasta un 24% de la población con tatuajes. Las reacciones adversas de los tatuajes son comunes y hasta ahora, los investigadores creían que solo las tintas eran las responsables, según consignó 20 Minutos.
“Los tatuajes tienen más que ver a simple vista. No se trata solo de la limpieza del salón, la esterilización del equipo o incluso de los pigmentos. Ahora descubrimos que el desgaste de la aguja también tiene un impacto en su cuerpo”, explica Hiram Castillo, uno de los autores del estudio y científico del Sincrotrón Europeo (ESRF, por sus siglas en inglés), con sede en Grenoble, Francia.
El trabajo demostró que las agujas de tatuaje tienen entre un 6 y un 8% de níquel, y entre un 15 y un 20% de cromo, los cuales se distribuyen hacia los ganglios linfáticos. Esto provoca una alta tasa de sensibilización en la población general y, por lo tanto, puede desempeñar un papel en las alergias a los tatuajes. Los resultados mostraron que cuando la tinta del tatuaje contiene dióxido de titanio (un pigmento blanco a menudo mezclado en colores brillantes como el verde, azul y rojo), desgasta la aguja. Esto no sucede cuando se usa tinta negra de carbón.
El equipo también estudió una aguja antes y después del proceso del tatuaje usando microscopía electrónica de barrido, que mostró la abrasión que había sufrido. “No cabe duda de que las partículas de metal se derivan de la aguja del tatuaje como resultado del molido mecánico puro”, dice el científico Bernhard Hesse, y agrega que el tamaño de las partículas que se encuentran en los ganglios linfáticos varía de 50 nanómetros a 2 micrómetros.
“El hecho de que todos los pigmentos y partículas de desgaste se depositen en los ganglios linfáticos requiere una atención especial en el desarrollo de alergias. Desafortunadamente, hoy, no podemos determinar el impacto exacto en la salud humana y el posible desarrollo de alergias derivado del desgaste de la aguja del tatuaje”, agrega.