Este viernes comienza el denominado Black Friday o viernes negro, una tradición estadounidense que se celebra el último viernes de noviembre de cada año para alentar las compras con descuentos, situación que muchas personas aprovechan dada la proximidad con navidad.
Sin embargo, expertos en neurología, psiquiatría y otras áreas afines, alertan sobre la importancia de encontrarse bien despiertos y conscientes al momento de acceder a realizar compras. "Comprar faltos de sueño o a última hora del día tiene sus riesgos y nos puede convertir en 'malos consumidores'", alertaron desde la Sociedad Española de Neurología.
“El sueño es fundamental para un funcionamiento óptimo físico y mental, pero también lo puede ser para nuestro bolsillo, más aún en estas fechas. Y es que, en el control de impulsos está implicada un área cerebral denominada corteza prefrontal y esta área es muy vulnerable a la falta de sueño o al sueño de poca calidad”, explicó la doctora Ana Fernández Arcos, Coordinadora del Grupo de Estudio de Trastornos de la Vigilia y el Sueño de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
Además, según los expertos de la SEN navegar por Internet y comprar por la noche también produce un estado de hiperalerta y un pico de secreción de dopamina que nos dificultará conciliar el sueño más adelante, generando sueños cortos y una peor forma física y mental.
La importancia del control de los impulsos
La calidad y duración del sueño recomendada es aquella que permita estar en condiciones óptimas para llevar a cabo las actividad diarias. La SEN recuerda que la cantidad de horas aconsejada varia de una persona a otra e incluso puede cambiar a lo largo de la vida.
No obstante la recomendación es de al menos 7 horas de sueño para los adultos sanos. Dormir menos horas o con una peor calidad hace que se alteren algunas funciones cerebrales como la atención, la memoria, la regulación emocional y la percepción sensorial.
Comprar por la noche ¿Sí o no?
La expansión del comercio online y las compras por la noche se han vuelto una acción habitual para muchas personas porque es el momento del día con más tiempo libre para realizar este tipo de tareas.
Sin embargo, los neurólogos explican que la somnolencia y el cansancio hace tomar peores decisiones y realizar compras que de otra manera serían mejor seleccionadas, más económicas o que incluso se pospondrían a un momento más adecuado o de mayor necesidad.
“Por esta razón, es mayor el riesgo de comprar cosas innecesarias o que no son adecuadas a nuestro bolsillo si la compra se realiza por la noche”, señaló Fernández Arcos.
Por otra parte, la doctora Celia García Malo explicó que la experiencia de comprar al atardecer o durante la noche tiene también otras repercusiones, ya que debería ser un momento para la relajación y comprar nos produce un estado de hiperalerta que nos dificulta posteriormente el sueño.
Por lo tanto, cuando la mente está cansada, la fuerza de voluntad está mermada y el cerebro no reflexiona todo lo que debería sobre las implicaciones del costo de las compras. Los neurólogos señalan, por lo tanto, que es más probable que se gaste más dinero al comprar faltos de sueño.
“Recomendamos evitar comprar cuando estamos privados de sueño, porque nuestro cerebro se vuelve ‘más impulsivo’ y ‘menos consecuente’ y recordar que las compras durante la noche también afectan a nuestro sueño y descanso normal”, concluyó la doctora Fernández Arcos.
Fuente: EFE Salud.