Aunque está prohibido, el cigarrillo electrónico gana terreno entre los adolescentes. La 5º Encuesta Mundial de Tabaquismo en Jóvenes señaló que el 7 por ciento de los argentinos entre 13 y 15 años usa vaporizadores. Desde la dirección Nacional de Promoción de la Salud y Control de Enfermedades No Transmisibles, reclamaron más fiscalización y una nueva ley de Control de Tabaco.
En contacto con el programa A diario (Radio 2), Verónica Schoj, directora Nacional de Promoción de la Salud y Control de Enfermedades No Transmisibles, se mostró preocupada por el avance del cigarrillo electrónico entre los adolescentes: chicos y chicas de entre 13 y 15 años lo usan, mientras que los adultos lo consumen en un 1,1 por ciento.
Advirtió que los vaporizadores suelen contener nicotina y otras toxinas que son nocivas para la salud y que, contrario a lo que se piensa, puedan desembocar en una adicción al tabaquismo.
“Algunos lo usan como menos dañino o como recurso que los puede ayudar a dejar de fumar y no es así”, aseguró.
“Estamos en una situación muy grave. Hay que fortalecer los mecanismos de fiscalización de este producto, que evidentemente falla”, señaló y reclamó: “Necesitamos una ley que mejore la ley de control de tabaco de 2011”.