Desde las neurociencias, los expertos sostienen que el cerebro puede entrenarse en forma positiva para fomentar el nacimiento de nuevas neuronas y el mantenimiento de las que ya existen. Esto se logra mediante hábitos de vida que logran incrementar o reducir esta situación.

Uno de los expertos es Álvaro Fernández Ibáñez, fundador de SharpBrains en Estados Unidos en 2005, quien se destaca por traducir la ciencia del cerebro en aplicaciones innovadoras para mejorar la salud, la educación y la formación.

El cerebro se entrena día a día

Sin percatarse de hacerlo, las personas entrenan diariamente sus cerebros para bien o para mal según las actividades que se realicen. “Es muy diferente hacer una serie de cosas que podemos hablar ahora porque hay mecanismos súper interesantes para mejorar la actividad del cerebro o estar viendo la televisión 20 horas al día sin dormir y comiendo patatas fritas. Ahí también estamos entrenado el cerebro, pero de un modo negativo y perjudicial”, explicó el experto.

La unidad básica del cerebro son las neuronas, y su fortalecimiento o debilitamiento depende netamente del uso que se les de. En este aspecto, Ramón y Cajal, el "padre de la neurociencia", destacaba la importancia de vivir en distintas ciudades ya que durante los primeros días o semanas había una desorientación, pero esa misma sensación de novedad y desafío es lo que generaba que las neuronas hagan un nuevo esfuerzo por conectarse entre sí y fortalezcan esa unión.

Desde entonces se investigó más y, si bien en la época de Ramón y Cajal se pensaba que la propiedad del cerebro de generar neuronas se terminaba en la juventud, Fernández Ibáñez resaltó que “hoy sabemos que no, que hay diferentes regiones del cerebro donde todos los días, hasta que nos muramos, están emergiendo nuevas”.

A través del ejercicio físico

El hábito “más claro” que mejora el número de nuevas neuronas y que, además, tiene otros beneficios, es el ejercicio físico, especialmente el aeróbico. Hay una “diferencia gigante” entre ser sedentario y hacer unas tres horas de este tipo de ejercicio a la semana.

Entre los más comunes se encuentran el correr, remar, bailar. "Uno debe notar que cuesta hablar ya que, si es demasiado cómodo, no funciona igual", destacó. 

El ejercicio cognitivo

De no usarse, las neuronas se mueren porque no se conectan entre sí. El cerebro solo pesa un 2% o un 3% del total del cuerpo y, sin embargo, consume cerca de un 25% de la energía: “Es decir, es un órgano muy caro de mantener”.

El ejercicio cognitivo contribuye a esa conexión y es una forma de entrenar el cerebro: “Ejercicio cognitivo sería leer un libro de un escritor nuevo o de un género nuevo, o escribir una historia corta, o salir a la calle e intentar hacer un tema de voluntariado. Tiene que haber novedad, variedad, un poco de desafío".

¿El estrés ayuda a entrenar el cerebro?

El estrés controlado y por un periodo corto de tiempo también ayuda a entrenar de forma positiva el cerebro. Tener esa sensación a corto plazo para que luego el cuerpo vuelva a un modo más óptimo y recupere sus procesos. El problema llega cuando esa sensación es permanente, entonces, se vuelve contraproducente, la creación de nuevas neuronas se paraliza. Si eso ocurre un día no pasa nada, una semana tampoco, pero si empieza a pasar meses o años el impacto cerebal y físico “es clarísimo”.

Las actividades perjudiciales

También hay un ránking para las actividades que entrenan al cerebro pero de una forma errónea. Una de ellas es el estrés a largo plazo y sin control: “Si lo sabes manejar va bien, si lo sabes manejar mal va mal”.

La pasividad es otro de los enemigos del cerebro: hacer cosas rutinarias, de forma mecánica, al igual que no dormir lo suficiente, porque si una persona no descansa bien, repercute en los procesos de generación de neuronas.

En cuanto a las pantallas y las redes sociales el experto opina que hasta el momento no hay suficiente evidencia científica para demonizarlas, pero sí señala que hay que educar para hacer un uso positivo de ellas.

También es consciente de que si bien para entrenar al cerebro es beneficioso hacer sudokus o sopas de letras, en papel beneficia más que hacerlo en formato digital porque este último tiende a generar otro tipo de enganche. Además, en el caso del teléfono móvil, éste tiene sonidos o efectos visuales que pueden distraer más. "En cambio, el papel, al ser estático permite una mayor concentración", sostuvo el experto.

La reserva cognitiva

Con el cerebro realizando su entrenamiento a lo largo de los años, Fernández Ibáñez hizo especial hincapié en la reserva cognitiva. "Si se entrena el cerebro, conseguiremos una reserva cognitiva, y cuanta más se acumule, mejor podrá resistir el cerebro a amenazas propias de la edad, como el Alzheimer", concluyó.

Fuente: EFE.