El precandidato a gobernador de Santa Fe por Juntos por el Cambio Maximiliano Pullaro anunció que lleva como vice a Gisela Scaglia, a quien definió como “persona de confianza de Horacio Rodríguez Larreta y mujer del agro”. Ambos recorren la provincia con la consigna de dar a conocer su plan de gestión y sus equipos técnicos.
En medio de una recorrida por el territorio santafesino, Pullaro destacó que “la provincia tiene una riqueza y un potencial que, si realmente se aprovecha, va a generar mucho crecimiento en cada región”.
“Voy a gobernar con el campo”, aseguró el ex ministro de Seguridad durante la gestión del gobernador Miguel Lifschitz (2015-2019). Y opinó: “El kirchnerismo nacional le puso el pie en la cabeza al campo y lo trató siempre como un enemigo; el gobernador, del mismo signo político, nunca defendió a Santa Fe con el carácter suficiente. Conmigo eso no va a pasar”.
En tanto, la candidata a vicegobernadora Gisela Scaglia reclamó a través de sus redes sociales “devolverle infraestructura al campo y reglas claras en la economía”.
“Esta semana recorrí 15 localidades y en cada una conté cuál es nuestro plan de gestión, qué vamos a hacer desde el primer día de gobierno. Yo vengo del sector productivo, mi papá es productor agropecuario, yo nací en el campo y viví hasta los 12 años en el campo. A mí no me tienen que contar lo que es el campo”, enfatizó.
Pullaro, por su parte, cargó contra lo que consideró el “modelo populista del kirchnerismo” que actualmente es “unitario” con "dinero que se va de las provincias para ser repartido en el conurbano bonaerense en concepto de dádivas”.
Según el actual senador, Santa Fe aportó $2.869.261 millones en 2022 y “volvió mucho menos” de lo que se aporta comparativamente con otras provincias. “Eso son caminos que no se construyen y que son necesarios para que el campo pueda sacar su producción”, agregó.
Por último, volvió a cargar contra el kirchnerismo: “Santa Fe necesita un gobierno con carácter, con decisión y valentía, que no se quede callado cuando vienen por las exportaciones de carne, por el aumento a las retenciones a la harina, a la soja o cuando nos golpean la industria del biocombustible para favorecer a los gobiernos kirchneristas de las provincias petroleras”.