El gobierno de Bolivia rechazó "enérgicamente" este lunes las "inamistosas y temerarias declaraciones" del gobierno argentino de Javier Milei, que en un comunicado publicado este domingo por la noche acusó a la administración de Luis Arce de hacer una "falsa denuncia de golpe de Estado". y de mantener a "más de 200 presos políticos", incluyendo a la expresidenta Jeanine Áñez y al gobernador opositor Luis Fernando Camacho.
"Bolivia ha decidido soberanamente vivir en democracia, con características interculturales, por lo cual defenderla ante cualquier acto militar que amenace con tanques de guerra y militares armados al gobierno constituido por el voto del pueblo, es claramente un golpe de Estado", salieron a aclarar desde el Palacio Quemado tras el comunicado de la Oficina de Milei.
Y calificaron de "desinformadas y tendenciosas" las aseveraciones de la administración libertaria sobre "una posible existencia de presos políticos o la posibilidad de inexistencia de un golpe de Estado militar fallido" y aseveraron que esto "constituye un exceso y un negacionismo inaceptable".
En su comunicado, Argentina había comparado a Bolivia con países como: "Cuba, Venezuela, Nicaragua, Corea del Norte" y advertido que "hace tiempo que la democracia boliviana está en peligro. No por un golpe militar, sin porque históricamente los gobiernos socialistas derivan en dictaduras".
"La convivencia pacífica y la hermandad entre nuestros pueblos, nunca debe ser perturbada por intereses mezquinos e ideologías fascistas", insistieron, en tanto, desde el gobierno boliviano que hizo un llamado a la "histórica amistad" entre ambos países.