La diputada nacional de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, pidió "cuidar las palabras" en el recinto y destacó la importancia de respaldar al gobierno en la negociación de la deuda, al señalar que el proyecto de restauración debe aprobarse "por unanimidad", y pidió a sus pares "no ser mezquinos" y "estar unidos" en esta cuestión.

"Es nuestro deber tener cuidado porque los abogados de los bonistas anotan cada palabra que uno dice y eso después figura en las sentencias", aseguró Carrió en el recinto, al recordar que le pidió a los presidentes de los bloques "que se vote en general rápidamente".

Consideró que si se llega a una "conclusión de respaldo al gobierno, esto tiene que ser cerrado" y después entonces se podrían discutir en particular los puntos del proyecto.

"Tengamos mucho cuidado con lo que decimos; es para dar respaldo a nuestros negociadores", insistió.

Para la diputada, a los organismos internacionales "no les importa la Argentina" porque es "el país del fin del mundo".

"Votemos por unanimidad si es posible, porque lo necesitan los que están en Washington", al mencionar erróneamente al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, en lugar del de Economía, Martín Guzmán, que encabeza las negociaciones.

Antes, Carrió había pedido la palabra para recordar que en 2001 presidió la comisión investigadora de lavado de dinero, que realizó un pormenorizado y polémico informe e incluyó duras imputaciones a ex funcionarios, bancos y a directivos de empresas del más alto nivel de la Argentina y el mundo.

"Hicimos un informe completo sobre la deuda junto con Mario Cafiero y presentamos la denuncia también del Megacanje", recordó y planteó: "Lo cierto es que no fue la Izquierda la que investigó la deuda sino un grupo de gente, radicales, transversales, pero ninguno de la izquierda".

El bloque de Izquierda


Previamente, desde el Frente de Izquierda, Romina Del Plá había asegurado en el recinto que "lo que se está haciendo en la sesión es debatir el sometimiento nacional al FMI, a los banqueros y especuladores y hundiendo y sometiendo a los trabajadores y al conjunto de la población a esa situación".

"Vamos a defender incondicionalmente los derechos de los trabajadores y vamos a reclamar la ruptura con el FMI y el desconocimiento de esta deuda fraudulenta y usurera", aseveró Del Pla, al adelantar el rechazo de la izquierda al proyecto para renegociar la deuda externa.