El presidente argentino, Javier Milei, clausuró este domingo un encuentro de movimientos ultraderechistas latinoamericanos en Brasil con un discurso teórico sobre los males del socialismo en que no hizo ninguna mención al jefe de Estado de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.

Las supuestas provocaciones del libertario al líder progresista brasileño, con el que nunca se ha reunido ni tiene una buena relación, se limitaron a los abrazos que tuvo con el expresidente Jair Bolsonaro, el líder de la ultraderecha en Brasil y principal adversario político de Lula.

El pronunciamiento del presidente argentino en su primera visita a Brasil había generado gran expectativa ante la posibilidad de que reiterara sus críticas a Lula, al que ha tildado de comunista y corrupto, y provocara una crisis diplomática entre ambos países, informa EFE.


Ello a que el presidente argentino alegó problemas de agenda que le impiden asistir a la cumbre que tendrá el Mercosur el lunes en Asunción, en la que se encontraría con Lula, pero confirmó su participación en la quinta versión latinoamericana de la Conferencia de Política de Acción Conservadora (CPAC), el mayor y más influyente foro de derechista del mundo, que concluyó este domingo en Brasil.

Las relaciones entre los presidentes de los dos mayores socios del Mercosur son nulas desde que Lula manifestó su apoyo en la campaña electoral al candidato peronista Sergio Massa, a lo que Milei respondió tildando al jefe de Estado brasileño de "corrupto" y "comunista".

La semana pasada, Lula dijo que aún no había tenido contactos con Milei pues espera que este le pida "disculpas", tanto a él como "a Brasil" por sus declaraciones, pero el argentino respondió inmediatamente que no pediría perdón por decir la verdad.

Los temores de una crisis se desvanecieron tras la rápida visita privada que el presidente argentino hizo este domingo a Balneario Camboriú, en donde se mostró a gusto con los principales adversarios de Lula pero se abstuvo de cualquier comentario o acto que pudiese amenazar las relaciones entre los dos países.

Milei clausura cita de ultraderechistas en Brasil sin ninguna mención a Lula

"Vamos a salir de la miseria les guste o no a los socialistas. Avanzaremos con su apoyo o sin su apoyo y pese a que han movido cielo y tierra para boicotearnos. No pasarán. No lo lograrán. Vamos a sacar al país adelante", dijo Milei.

"Quiero decirles que soplan vientos de cambio en el mundo y que la gente ya sabe que el socialismo es un sistema que empobrece y por eso comienzan a rechazarlo. Los vamos a sacar a patadas de donde estén", afirmó.

Agregó que es hora de que el mundo despierte y destierre el socialismo, un sistema que, dijo, ha asesinado a más de 150 millones de personas en todo el mundo.

La conferencia de derechistas contó con la participación de cerca de 3.500 personas, entre ellos líderes de la ultraderecha en países como Chile (José Antonio Kast) y en México (Eduardo Verástegui).

Contacto con Bolsonaro desde el sábado

 

Jair Bolsonaro recibió el sábado a la noche al presidente argentino Javier Milei en el lobby del hotel de la ciudad balnearia de Camboriú. Luego, el mandatario argentino y el dirigente brasileño vieron juntos el partido de Copa América donde la selección del país vecino quedó eliminada frente a Uruguay.

Bolsonaro afirmó este sábado que no retrocederá en su carrera política pese a todos los procesos judiciales que enfrenta, en un evento ante miles de correligionarios y simpatizantes que dejaron claro que no aceptan otro candidato para las presidenciales de 2026.

"A pesar de la Policía Federal haber ido tres veces a mi casa y a que aún enfrento unos 300 y pocos procesos, vale la pena seguir. No vamos a retroceder", afirmó el líder ultraderechista en su intervención en la quinta edición de la conferencia.

El capitán de la reserva del Ejército hizo el comentario dos días después de que la Policía Federal le formulara cargos por asociación para delinquir, peculado y lavado de dinero en un caso en que lo investiga por el intento de apropiación de unas valiosas joyas que países árabes le obsequiaron a la Presidencia brasileña.

Bolsonaro también ya fue imputado en un proceso por falsificación del certificado de vacunación contra covid y es acusado en otras investigaciones, entre las cuales una en la que se le señala como inductor de los ataques antidemocráticos del 8 de enero de 2023, cuando miles de sus seguidores intentaron forzar un golpe de Estado contra el presidente Luiz Inácio Lula da Silva.



El líder ultraderechista ya fue condenado en dos procesos de la Justicia electoral, que lo inhabilitó políticamente por ocho años, lo que por ahora le impide disputar las presidenciales de 2026.