Un preso de Coronda fue imputado este lunes por haber ejecutado personalmente una balacera en la zona oeste de Rosario. Lo curioso es que el ataque a tiros lo cometió el 9 de enero del año pasado, cuando se encontraba gozando de una salida transitoria. El propio gatillero se filmó con el celular mientras disparaba e incluso tenía el GPS activado, cuestiones que resultaron relevantes e incriminatorias.
Carlos José Gómez, alias “Soga”, fue acusado por la fiscal Valeria Haurigot por haber disparado quince balazos contra una casa situada en Saavedra al 5500, en barrio Triángulo. Al momento del hecho, en el interior del domicilio estaba una mujer con su hija, que resultaron ilesas. La fiscal de Balaceras también le atribuyó el delito de portación ilegítima de arma de fuego.
Gómez quedó en prisión preventiva efectiva por 90 días, según la resolución del juez Nicolás Foppiani, quien además revocó las salidas al recluso.
De acuerdo a los datos ventilados en la audiencia, en la fecha en la que el gatillero cometió la balacera tenía 18 horas para ir a su casa y luego volver al pabellón 6 (módulo B) del penal de Piñero, donde en ese momento estaba preso.
Gómez fue detenido en marzo de 2021, cuando cayó en un procedimiento policial con una pistola calibre 9 milímetros y un cartel que decía “tenés 24 horas para dejar la casa”. También en ese momento cometió el delito –portación ilegítima de arma de fuego– mientras tenía una salida transitoria.
Durante su arresto de marzo del año pasado, la Policía secuestró su celular. Después de haber sido peritado por orden del Ministerio Público de la Acusación, se halló el video de la balacera que él mismo había filmado. Para peor, tenía activado el GPS, por lo que se ubicó solo en el lugar del hecho.
El hoy imputado “Soga” Gómez es un delincuente conocido para la Justicia provincial. El 30 de diciembre de 2012 recibió una pena a 4 años y 6 meses de prisión por robo y robo agravado por vehículo dejado en la vía pública. El 10 de febrero de 2015 le dieron 3 años y 4 meses de cárcel por robo calificado en grado de tentativa. Y el 26 de agosto de 2016 fue condenado a 4 años por portación ilegítima de arma de fuego y robo calificado, motivo por el cual se le unificaron las penas en 11 años.