Las "masivas" coincidencias que un grupo de especialistas encontró entre un hombre con barbijo y gorra que aparece en imágenes de baja calidad escapando de la escena y el detenido por el crimen del "Trinche" Carlovich lo acorralan: Juan Ariel Maidana, alias Bocacha, quedó ahora más cerca de ser acusado y afrontar el juicio oral y público.
La pericia es novedosa en Santa Fe. Fue solicitada por la fiscal de Homicidios Georgina Pairola a un cuerpo específico integrado por arquitectos y otros especialistas de la Policía Judicial del Ministerio Público Fiscal de Córdoba. Incluye la comparación y medición de imágenes y objetos con un software específico y otros elementos.
Concluye que hay un "muy alto grado de conformidad identificativa" al comparar al detenido en fotos con quien aparece en filmaciones de poca definición obtenidas de distintas cámaras. Como ejes aparecen la altura, la contextura física, los rasgos y hasta la forma de desplazarse. También sus gestos. Todo lleva a determinar "masivas correspondencias morfológicas y biométricas", según información que reprodujo Telenoche Rosario (El Tres).
"Se establece entre el sujeto sindicado como autor del hecho y el imputado un muy alto grado de conformidad identificativa", establecieron los peritos cordobeses, que colaboraron con la Fiscalía de Rosario, en un dictamen que ya está en poder de todas las partes.
Para los especialistas, hay "fuertes y sugestivos indicios" sobre tres rasgos particulares de Maidana: lesiones en la pierna izquierda, un tatuaje en la pierna derecha y la forma de la oreja.
Todo eso transforma el dictamen en una evidencia "determinante" para arribar a la certeza de la autoría y una eventual condena por robo seguido de muerte, según la imputación actual.
Maidana había sido llevado a audiencia el año pasado, en los días posteriores a ser detenido bajo sospecha de ser el autor, con indicios colectados por la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y el MPA. El escape del lugar en dirección a la casa en la que cayó, a unos 250 metros del lugar del hecho, y un apodo que sonaba entre vecinos como autor de episodios similares por los que fue imputado aparecían entre otros elementos.
De hecho, un informe de Inteligencia de la AIC lo ubicaba en las semanas previas al hecho que tuvo a Carlovich como víctima como parte de una banda que realizaba violentos asaltos en la zona. Había sido elevado al fiscal Gustavo Ponce Asahad, antes de que fuera detenido y destituido por corrupción, pero el funcionario no había ordenado ninguna medida.
Por el caso puntual de Tomás Felipe Carlovich, la acusación carecía de testigos que puedan reconocerlo: la secuencia del abordaje, la agresión y la huida en la bicicleta del ídolo de Central Córdoba fue en un abrir y cerrar de ojos y de parte de un sujeto con su cabeza y rostro ocultos. Dos personas que estaban en una farmacia vieron el instante pero nunca estuvieron en condiciones de efectuar una rueda.
La vida de Carlovich se apagó horas después de ser agredido en Eva Perón y Paraná el 6 de mayo de 2020, a las cinco y media de la tarde. Ahora, el avance de la investigación suma una prueba determinante, que acorrala al único y solitario imputado y deja a la fiscal Pairola en condiciones de acusar para llevarlo a juicio oral y pùblico.