Tres sospechosos de nacionalidad boliviana fueron detenidos el jueves de la semana pasada en un control de Gendarmería en la ruta 34, a la altura de Luis Palacios. En un Peugeot 408 llevaban 20 kilos de cocaína de máxima pureza, que fueron secuestrados en un doble fondo del tanque de combustible. Los imputados fueron rápidamente indagados el viernes bajo el nuevo sistema acusatorio de la Justicia federal de Rosario.
De acuerdo a los datos recolectados por Rosario3, el Peugeot 408 fue frenado para verificar su documentación. Como los gendarmes notaron mucho olor a combustible entrevistaron al conductor, que refirió haber cargado nafta pocos kilómetros atrás. Ahí se dio la clave, cuando el automovilista exhibió varios comprobantes de pago de combustible, que daban un promedio de recarga cada aproximadamente 200 kilómetros.
Ante la sospecha que las constantes cargas de nafta fueran por un doble fondo en el tanque de combustible, los agentes revisaron el vehículo y hallaron 17 ladrillos de cocaína de máxima pureza, que arrojaron un pesaje de 20 kilos.
En el Peugeot 408 había dos ocupantes, que se contradijeron al ser consultados sobre la titularidad del auto. Luego, uno afirmó que venían de Tucumán mientras que el otro señaló que venían de Salta.
En medio del operativo, al acompañante del auto le sonó el teléfono en reiteradas oportunidades y contó ante la fuerza federal que era su hermano, que venía en otro vehículo adelante del 408.
Gendarmería ubicó el auto en cuestión, que era una camioneta Alaskan, y detuvo al conductor, ya que se presume que era quien hacía de “punta” en la ruta.
Los tres sospechosos fueron acusados por el fiscal federal de San Lorenzo Claudio Kishimoto y el fiscal federal Matías Scilabra –Fiscalía federal Nº 2– ante el juez Eduardo Rodríguez Da Cruz.