Familiares y amigos de Carlos "Bocacha" Orellano, el joven que fue hallado muerto en el río Paraná luego de ir a bailar al boliche de La Fluvial en febrero pasado, realizaron este martes una movilización con corte de calle en la zona de bulevar Oroño y el río. La protesta fue por el aviso de una contaminación en las pruebas enviadas a Buenos Aires para realizar la autopsia.
El padre del joven, Edgardo Orellano, mostró su malestar por la falta de avances en la investigación. “Se nos ríen en la cara. Después de ocho meses esperando los resultados de la autopsia, de Buenos Aires avisan que llegaron las muestras contaminadas”.
Además, señaló al Insituto Médico Legal (IML) de Rosario que “se jactaba de tener los mejores profesionales del país”.
“En el IML no dejaban trabajar en la pericia a nuestra parte porque decían que tenían personal altamente capacitado. Se demostró que no eran altamente capacitados o son malintecionados”, dijo el papá de Bocacha.
“Nos hicieron perder ocho meses mientras los asesinos siguen libres porque ellos no tienen las muestras. Ahora hay que volver a sacar el cuerpo de mi hijo y seguir profanando el cuerpo. No lo dejan descansar ni después de muerto”, lamentó el padre de la víctima en diálogo con Radio 2.