Este miércoles el gobierno provincial reabrirá la comisaría 13ª y del acto participará Martín García, el nuevo jefe de la Policía de Santa Fe. “Tenemos el foco en Rosario y estamos trabajando. Me encontré con profesionalismo y espíritu de servicio”, confió el hombre que reemplazó a Miguel Oliva. Anticipó más patrulleros a partir de una partida de 90 millones de pesos asignada para arreglar móviles en reparación. Dijo que el personal policial secuestró 56 armas de fuego en una semana, sólo en el Departamento Rosario.
García, ex director de la Policía de Acción Táctica (PAT), sostuvo que tiene buena relación con los jefes de las fuerzas federales que constituyen el llamado Comando Unificado. “Todas las semanas se pone sobre la mesa las novedades, y lo que tenga que corregirse se corrige”, dijo, en contacto con el programa De boca en boca (Radio 2).
García recordó que el narcomenudeo y las bocas de expendio que actúan como usinas de violencia en los barrios de la ciudad y el Gran Rosario constituyen delitos federales y “están todos informados”, es decir, que la fuerza provincial comunicó los puntos a la Justicia Federal.
“Lleva su investigación: para poder allanar un lugar hay que tener pruebas y ello lleva su tiempo”, analizó.
Consultado sobre el número de patrulleros en las calles rosarinas, apeló a tecnicismos de la fuerza y dijo que “hay 60 precintos que están cubiertos en su totalidad por las distintas unidades de Orden Público (inspecciones zonales, comisarías y destacamentos) y Agrupación Cuerpos (Comando Radioeléctrico y otras unidades de calle)”. A lo que hay que sumarle los móviles de distintas direcciones como Comunitaria y PAT, por lo que terminó redondeando el número en 100.
“Hay distintas tareas: custodias fijas, esporádicas”, explicó sobre los siempre insuficientes recursos con los que cuenta la fuerza. Para contrarrestar este panorama, García anunció que “llegó una partida de 90 millones para arreglar patrulleros”.
Sobre el secuestro de armamento García dijo que en el lapso de una semana las fuerzas incautaron 56 armas. Un número abultado, tal vez, por la requisa que arrojó unas 30 unidades entre rifles, escopetas y revólveres que tenía un vecino de Cerrito 3700 en barrio Bella Vista, que fue denunciado por un familiar.
Para revertir la situación social y cultural que abona la delincuencia “no sólo es partícipe la Policía”, dijo el jefe policial. “Tienen que participar varias áreas: hay hechos que se resuelven con violencia y estamos hablando de chicos jóvenes en edad que deberían estar en otra actividad y no delinquiendo”.
El jefe policial estará en la “refuncionalización” de la seccional 13ª de San Nicolás 2023, donde funcionó la Unidad Especial de Protección de Testigos tras el cierre de la seccional, en el marco del trunco proyecto de megaestaciones policiales.