El juez federal Carlos Vera Barros procesó con prisión preventiva a la corredora inmobiliaria Mariana Ortigala, ya que consideró que tiene elementos suficientes para estimar que esta mujer, que también tiene una causa provincial abierta por extorsiones, es culpable de haberle alquilado –con intención deliberada– un departamento ubicado en Francia al 800 a un vendedor de drogas que está relacionado con Los Monos.

Por ello, este viernes Vera Barros procesó a Ortigala por el artículo 10 ley de la ley de drogas (23.737), que refiere al facilitamiento de un lugar para que concurran personas que cometen delitos relacionados con el comercio de estupefacientes. Además, trabó un embargo sobre los bienes de la investigada por 100 mil pesos.

El expediente federal que se le sigue a Ortigala surgió con un allanamiento en agosto de 2021 en un inmueble de Francia al 855 por una causa de venta de drogas.

Según fuentes federales, quien alquilaba ese departamento era Ortigala, que al parecer se lo había subalquilado –sin autorización de la propietaria– a Alan Gabriel Coronel, un hombre investigado por narcomenudeo que ya contaba con antecedentes por narcotráfico, puesto que había sido condenado en la causa federal Los Patrones, que tuvo en el banquillo al cabecilla de los Monos Ariel “Guille” Cantero.

“La maniobra de Ortigala no es aislada”, señalaron a Rosario3 fuentes judiciales. “Sabía a qué se dedicaba Coronel y por esa razón lo auxilió”, confiaron los investigadores.

El nombre de Ortigala ya había rozado otros dos expedientes por narcotráfico en su rol de operadora inmobiliaria. A la luz de los hechos, para los investigadores se trata de un accionar “metódico”.

Consigue inmuebles para personas ligadas al narcotráfico en pro de asegurarles anonimato”, indicaron los investigadores federales.

En febrero de 2017, personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) allanó un departamento de Montevideo al 3700 y un domicilio de Marcos Paz al 6100 en el marco de una redada contra el llamado clan Insaurralde que arrojó unos cien kilos de cocaína secuestrados. Por esos días, la propia Ortigala, que administraba esas propiedades, se presentó ante la Justicia para deslindar su responsabilidad y aseguró ser sólo una “intermediaria”.

Una situación análoga se dio en noviembre de 2019 cuando fuerzas federales allanaron un domicilio de Castellanos al 900, cuya tenencia estaba asignada, por contrato, a Iván Gastón “Loro” Ramírez. En la vivienda, secuestraron más de 8 kilos de cocaína, más de 2 millones de pesos y 110 mil dólares.

Personal de la Policía Federal Argentina (PFA) constató que, en rigor, en ese domicilio de barrio Echesortu residía Rodolfo Héctor “Eri” Masini, considerado –y luego condenado– como un importante proveedor de cocaína en la región. Tanto Masini como Loro Ramírez fueron condenados a 11 y 8 años y seis meses, respectivamente, en una causa en la que también fue penado el piloto comercial Julio Andrés “Peruano” Rodríguez Granthon, señalado por investigadores de ambos fueros penales como un jugador de peso en el hampa local.