El juicio contra los acusados de estar detrás del cargamento de 1.658 kilos de cocaína que fueron secuestrados en agosto del año pasado en operativos realizados en Empalme Graneros y República de la sexta, está por finalizar. Sobre finales de la semana pasada, los fiscales federales Federico Reynares Solari y Matías Scilabra adelantaron que pedirán penas de hasta 15 años de cárcel para los procesados.
Reynares Solari, fiscal general ante los Tribunales Orales en lo Criminal Federal de Rosario, y Scilabra, fiscal federal de la Regional NEA de la Procunar, sostuvieron durante el alegato de clausura ante los jueces Eugenio Martínez Ferrero, Osvaldo Facciano y Mario Gambacorta (integrantes del TOCF Nº 3), que quedó evidenciado que se trató de una organización de “carácter transnacional, sumamente compleja, bien diferenciada entre partes”. Indicaron que se encontraba conformada por financistas, por un grupo que se encargaba de tener el contacto directo con ellos mientras que otros imputados que llevaban adelante la logística.
Los pedidos de penas
Para Gabriel Nicolau y José Damián “Tano” Sofía solicitaron 15 años de prisión por considerarlos coautores del delito de “comercio de estupefacientes y por el contrabando agravado por tratarse de estupefacientes inequívocamente destinados a su comercialización agravado en ambos delitos por la cantidad de personas involucradas, en grado de tentativa”.
Los fiscales requirieron 14 años de prisión para Oscar Rossi; 12 años para Marco Páez; 10 años para Lucas Hitters; 6 años para Fabio Crucianelli mientras que para Gastón Sofía y Osvaldo Gorosito solicitaron 4 años. A todos los señalaron por haber cometido con distinto grado de participación los delitos de “comercio y contrabando agravado de estupefacientes destinados a su comercialización y por la cantidad de personas intervinientes”.
En la exposición del MPF, se indicó que el ciudadano colombiano Gabriel Rojas Londoño –vinculado a la jefatura de la organización– se encuentra detenido en Dubai, Emiratos Árabes, desde noviembre del año pasado. Ramírez Duque cayó en España en mayo pasado, mientras que Newson Sabogal se encuentra prófugo.
En las próximas semanas continuarán los alegatos por parte de las defensas y luego se conocerá el veredicto correspondiente.
El caso
Según la investigación, la organización se dedicaba principalmente al contrabando de droga en el orden internacional entre febrero y agosto del año pasado, cuando se hicieron los operativos.
La maniobra completa implicó el hallazgo de 1.515,3 kilogramos de cocaína que fue secuestrada en el allanamiento de un galpón en Génova 2425 y de 143 kilogramos de sustancia estupefaciente que fue incautada en otro allanamiento de un galpón ubicado en la calle Cerrito 17 –ambos en Rosario–.
Tal como se comprobó, los imputados habían gestionado la exportación de pellets de maíz contenidos en bolsas “big bag”, dentro de las cuales acondicionaron y disimularon 1.259 paquetes rectangulares con material estupefaciente (clorhidrato de cocaína) con destino –presumiblemente– a España.
La causa se inició a partir de la acumulación de dos expedientes anteriores e independientes llevados a cabo por divisiones de la Policía Federal Argentina. Uno fue encarado por la Dirección General Operaciones Antidrogas Hidrovía del Paraná respecto a una persona que había sido señalada como partícipe de una organización que se encontraba gestionado un envío de estupefacientes al exterior y que, si bien se había desvinculado de la misma, siguió generando nuevos contactos para concretar ese objetivo.
La otra causa la llevó adelante la División Operaciones Federales, a partir de datos aportados por las autoridades de la Drug Enforcement Administration (DEA), donde daban aviso del ingreso al país de un ciudadano de nacionalidad colombiana que se dedicaba a actividades relacionadas con el tráfico de drogas.
Los agentes comenzaron a vigilarlos y registraron que realizaron varias reuniones con diferentes personas, concluyendo que se encontraban ante una organización celular, formada por varios eslabones: un financista o jefe, un grupo que se encargaba de la coordinación en Argentina y otro grupo encargado de la logística para la extracción del material estupefaciente hacia el exterior.
Así, según la investigación se logró dar con los integrantes de la organización que se encargaba del contrabando de droga que estaba a cargo de Gabriel Nicolau y el grupo responsable de la logística para la extracción del material estupefaciente hacia el exterior tenía como encargado a José Damián Sofía, alias el "Tano".