A más de 24 horas del incidente con disparos de arma de fuego y dos heridos que tuvo lugar en Zeballos y Corrientes en la tarde del jueves, no se reportaron novedades de los involucrados en el violento episodio. Ocurre que el conductor de la camioneta que habría repelido un asalto a los tiros no se presentó a declarar y, según voceros de la Fiscalía, había medidas para identificarlo, al igual que a el o los presuntos asaltantes, en un hecho cuya versión preliminar fue un intento de robo.
 

Los testimonios señalaron que, alrededor de las 15, un hombre abordó a una camioneta –Hilux o Amarok– blanca que estaba estacionada por Zeballos e hizo estallar el vidrio con un elemento contundente y se alzó con una mochila para escapar a la carrera por Zeballos en dirección este.

Algunas versiones hablaron de un forcejeo con el conductor de la pick up que se bajó inmediatamente y con una pistola 9 milímetros disparó al menos 5 balazos imprudentes, el número de vainas halladas más tarde. Todo, en una intersección colmada de gente que puso de relieve la negligencia de la persona que portaba el arma y la accionó.

En la intersección con Corrientes, los disparos alcanzaron a una mujer de 52 años y a su hijo de 17, que sufrieron heridas en una pierna y un brazo, respectivamente, y fueron asistidos en una verdulería por una joven hasta la llegada de la ambulancia. No hubo que lamentar lesiones graves.

El auto de una empresa de medicina privada que estaba estacionado por Corrientes, entre Zeballos y 9 de julio, recibió un impacto a la altura de la óptica.

El auto de una empresa de medicina privada estacionado por Corrientes fue alcanzado por una bala.

El destino del botín es uno de los enigmas del episodio. No está claro si quedó en manos del maleante o fue recuperado por el tirador. Ni tampoco trascendió el contenido del bolso.

Mientras el personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) perita el contenido de las cámaras para establecer las identidades de los involucrados, a los investigadores les llamó la atención que el conductor de la camioneta aún no se haya presentado a declarar. Acaso, se especula, porque el arma utilizada podría estar floja de papeles. Y por las consencuencias penales de una acción cargada de impericia.

La causa está en manos de la fiscal de la Unidad de Flagrancia en turno, Karina Bartocci y según voceros judiciales hay medidas en curso “en reserva” para establecer las identidades de los protagonistas.