La historia del “falso gerente” de un banco que engañó a una mujer de 87 años y le robó los ahorros de toda su vida dio un giro inesperado. Un familiar lo reconoció luego de ver las imágenes de El Tres y Rosario3 y contó que el hombre tiene varios antecedentes por estafas por las que incluso fue denunciado sin que las fuerzas de seguridad procedan a detenerlo.

El hombre dio su testimonio a Telenoche Rosario con la voz distorsionada, de espaldas para que no se vea su cara por miedo a represalias a su familia. Dijo que no tiene problemas en testificar ante la Justicia para que identifiquen al estafador y lo arresten.

El testigo dijo que al ver las imágenes de la cámara de seguridad detectó que se trataba del mismo familiar que lo había estafado, hecho que derivó en una denuncia al Centro de Justicia Penal.

“Tiene varias denuncias y no entiendo cómo sigue estafando gente. Cuando lo denunciamos no me dieron ni pelota, nos citaron una vez y nunca más. Teníamos testigos, vecinos robados, teléfonos”, aseguró el testigo.

El hombre que habló con el equipo periodístico de El Tres aseguró que el “falso gerente” tiene 34 o 35 años y no descarta que tenga vinculaciones con algunas bandas narcocriminales. También extendió el manto de sospecha sobre la mujer de quien dijo que es niñera de un gerente de bancos, por lo que podría estar aportando datos.

“La mujer es medio rara, nunca me cerró. No sé si la familia de ella no está metida en algo porque no puede ser que siendo ella niñera tenga 4 o 5 tarjetas y estén edificando una casa”, dijo el testigo secreto.

“Si la Justicia me busca para testificar no tengo problemas. Miedo a él no le tengo, quiero que venga y dé la cara. Esto lo hago por el daño que nos hizo a nosotros. Tengo bronca y vergüenza”, concluyó.

 

La última estafa


 

El acusado engañó a una mujer de 87 años aduciendo que había coordinado con su hijo que iba a cambiarle sus dólares en mal estado en el banco y por eso buscó los ahorros por su casa.

El hecho ocurrió el lunes pasado a las 10.30 de la mañana en un edificio de calle Zeballos al 1200

A cara descubierta, el hombre saludó con un beso en la mejilla a la señora y recibió sus 8500 dólares, que serían los ahorros de toda su vida y se fue en su vehículo. El estafador quedó registrado por las cámaras de videovigilancia.