Investigadores de la Policía Federal Argentina (PFA) y el Servicio Penitenciario Federal (SPF) evitaron un plan de fuga del capo narco rosarino Esteban Líndor Alvarado de la cárcel de Ezeiza en un helicóptero que sus cómplices llegaron a comprar.
Según informó el Ministerio de Seguridad nacional, desplegaron un “complejo y coordinado” operativo de seguridad en el que se “detectó, previno y frustró” una fuga de película.
El plan de Alvarado para evadirse del penal de Ezeiza incluía nada menos que un helicóptero que fue secuestrado junto a otros elementos importantes, indicaron fuentes oficiales.
El procedimiento fue en “hermético silencio y coordinación” por parte de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la PFA, con la colaboración de las Direcciones de Seguridad y de Inteligencia Penitenciaria del SPF, y la Procunar.
Al frustrar el plan de fuga, siguieron con la detención de peligrosos narcotraficantes que integran el círculo de confianza de Alvarado. El líder criminal cumple condena a prisión perpetua en el Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza.
“Los investigadores lograron obtener información de inteligencia criminal que permitió conjurar un plan que llevaba más de seis meses de planificación y que implicó la compra de un helicóptero en el extranjero mediante complejas maniobras de lavado de activos”, informaron desde los organismos de seguridad.
Los detalles del operativo se mantuvieron en estricta reserva para garantizar su éxito y la seguridad de todos los integrantes de las fuerzas intervinientes.
Además de las detenciones y el secuestro del helicóptero, se allanaron diversos domicilios de varias provincias. También hubo requisas en la cárcel federal de Ezeiza, en un aeródromo privado, se secuestraron armas, automóviles, elementos tecnológicos y gran cantidad de dinero en efectivo.
En el caso intervinieron el juez federal Ernesto Kreplak y los fiscales federales Diego Iglesias y Cecilia Incardona.