El Observatorio Político Electoral de la facultad de Ciencia Política (UNR) analizó este jueves el debate televisado por El Tres, durante el programa De 12 a 14, entre los cinco candidatos a concejal de la ciudad: Lisandro Cavatorta, Miguel Tessandori, Ana Laura Martínez, Juan Monteverde y Ciro Seisas.

El intercambio de discursos e ideas entre quienes aspiran a ocupar una banca en el Concejo Municipal de Rosario a partir del 10 de diciembre próximo fue transmitido, además, por Radio 2 y a través del streaming de Rosario3.

La licenciada Lourdes Lodi, directora del organismo universitario, en diálogo con La primera de la tarde (Radio 2) destacó el formato y sugirió poner al debate el nombre de Mauricio Maronna –cuyo fallecimiento se anunció durante el transcurso del intercambio mediático entre los candidatos– como “un legado al periodista que nos invitó siempre a pensar y a reflexionar sobre la política".

"No hay analista político de esta provincia que no lea a Mauricio Maronna, como termómetro o contrapunto”, expresó.

Lodi felicitó el trabajo periodístico realizado por Televisión Litoral SA: “Me gustó el formato porque hubo menos libreto y más debate real y más intercambio de ideas, aunque todos los candidatos hayan llevado sus apuntes estudiados. Lo bueno es que se hizo en un marco de diálogo y respeto, más allá de las chicanas".

Subrayó además que "hubo buena coordinación en el manejo de los tiempos y fue valioso ponerlo a la hora del programa porque apunta a una ciudadanía que quizás no es la que leía a Maronna los domingos".

"El voto informado siempre suma y la información en un contexto de los resultados de las elecciones primarias, es un plus, porque en las últimas Paso tuvimos un 60% de participación ciudadana y de ese 60% hubo más de un 10% de votos en blanco o nulos”, agregó Lodi.

“Vi distintos posicionamientos que tienen que ver con la procedencia de cada uno y el contexto en el que se da la discusión. Los vi preparados, pero con distintas actitudes. Vi un Cavatorta que arrancó muy enojado y una Anita que empezó más combativa que dialoguista”, dijo la profesional y luego hizo puntualizaciones sobre cada candidato.

“En el caso de Cavatorta, se posicionó más como el concejal de la calle que como el candidato de Perotti y me sorprendió la idea que expresó sobre la sociedad a la que dijo que «no hay que administrarla, sino transformarla» y la pregunta es cómo se transforma, más allá de que la política como herramienta, también tiene que ver con la gestión y la administración. De hecho, tampoco se puede transformar solamente con proyectos y ordenanzas, que es lo que estos candidatos harán a partir del 10 de diciembre próximo. Para esto, también se necesitan acuerdos y consensos. Cavatorta dijo que los candidatos tenían que «competir». Me parece que la clave está más en el plano de la colaboración y del diálogo que en el de la lógica adversarial”, analizó.

“En el caso de Seisas –explicó– lo hizo en todo momento, y así lo dijo, como el concejal de Javkin, diciendo que no es político, con lo cual reconoció su origen. Veremos si luego del 10 de diciembre se va convirtiendo en uno de ellos. Su postura fue la de bancar una gestión, bancar un proyecto. Lo que se hizo en contexto de emergencia por la pandemia y lo que se está haciendo. Con conciencia de la realidad, sin un total idealismo, pero tampoco con mirada pesimista”.

Tessandori –dijo– se paró en un absoluto lugar de outsider, quizás empatizando más con el ciudadano medio, como lo llamó él, y con los problemas de la ciudadanía, desde la lógica del sentido común. Quizás desde menos propuesta técnica, pero desde la sensibilidad de lo que nos pasa”.

Y cerró diciendo que “Monteverde se posicionó desde su proyecto joven e idealista hablando desde un colectivo y Anita, más autónoma en su posición y –dado que es concejal actualmente– no cargó con el peso de Seisas y Cavatorta y su referencia con los poderes ejecutivos municipal y provincial”.

Ganadores y perdedores

 

Lourdes Lodi fue cauta a la hora de definir quiénes resultaron ganadores o perdedores durante el debate realizado: “Desde el lugar que uno lo mire, el ganador para mí, puede ser el perdedor para otro, ya que uno tiene sus posturas ideológicas previas y también cuando hablan de determinado barrio, quizás las personas que viven allí se sienten aludidas y reconocidas en esa discusión".

"Escuchamos algo de propuestas, pero creo que lo más importante en el debate –a diferencia de lo que podemos observar en un spot publicitario– es que uno también ve y escucha el tono, las caras de enojo y posiciones más agresivas, más serenas y más preocupadas”, añadió.

En ese sentido, destacó la cuestión de la imagen y del conocimiento previo que los electores tienen respecto de los candidatos que trabajan en medios de comunicación. “La política tiene que ver también con pasiones y cuestiones de piel, sobre todo con Cavatorta, Seisas y Tessandori, a quienes hemos dejado entrar (desde la televisión) a nuestros almuerzos y a nuestras casas durante mucho tiempo. Esto marca una identificación que guarda un correlato en relación con cómo se escucha a cada uno. Tessandori habló de «credibilidad y confianza». Ese es un capital social que tendrán que transformar en un capital político”.

“Creo que el elector del próximo 14 de noviembre habrá sabido distinguir quiénes venían con una lógica más antagónica, quiénes intentaron sacar crédito de la grieta. Esa grieta que se impuso en la elección nacional primaria, pero no a nivel del Concejo Municipal de Rosario. Respecto de quienes retomaron la cuestión de la grieta, puede pensarse como una estrategia para sumar, pero a veces el ciudadano está un poco cansado de la lógica amigo-enemigo, propia de la política. Eso también se observó tanto en las chicanas como en los tonos de voz. El debate es una herramienta valiosa y de aprendizaje para todos”, concluyó Lodi.