Cavia y Gallardo, la misma esquina donde fue el doble crimen en la noche de este miércoles, ya había figurado en una crónica policial de hace cinco años con un personaje de peso en el mundo del narcotráfico de Rosario como protagonista. El lugar donde anoche fueron acribillados Kevin Mora y Nahuel Segovia fue el mismo escenario de una brutal balacera con tres heridos el 27 de junio de 2017.
El asentamiento irregular, de acuerdo a investigadores policiales, es un territorio en disputa y con varios búnkeres. Algunos de ellos, de Emanuel “Ema Pimpi” Sandoval, el único condenado por el atentado a tiros contra la casa del ex gobernador Antonio Bonfatti.
“Ema Pimpi” fue asesinado en octubre de 2019 dentro de una casa de barrio La Florida mientras cumplía arresto domiciliario por la balacera con tres heridos en Cavia y Gallardo. Por el hecho, el fiscal Adrián Spelta lo acusó a él y a su hermano Lucas Sandoval de haberle disparado a las víctimas.
Los jóvenes baleados, según la teoría del caso, habían comprado droga en un búnker del clan Sandoval. Allí tuvo lugar una discusión porque habían quedado disconformes con la calidad de lo que habían comprado, razón por la cual Lucas y “Ema Pimpi” los fueron a buscar una hora más tarde y los atacaron en Cavia y Gallardo desde un auto y una moto.
Lucas Sandoval fue condenado en diciembre de 2019 a la pena de 11 años de prisión por la balacera.
Ahora, Cavia y Gallardo volvió a ser un escenario sangriento. En la noche de este miércoles fueron asesinados Kevin Mora (25 años), Nahuel Segovia (25) y resultaron heridos Mauricio M. (28) –heridas en cráneo y tórax– y un nene que está gravísimo en el hospital de Niños Zona Norte.