Cristian, un joven cartonero que encontró las bolsas con partes de cuerpo humano en un contenedor de basura de Piraní y Anchorena, contó cómo fue ese momento de horror que lo dejó “traumado” y reconoció estar aún afectado por las imágenes “grabadas” en su cabeza.
“Me llamó la atención la bolsa y la abrí. Vi una pierna y justo cayó un vecino y le digo: «Perdón que lo moleste pero encontré un cuerpo»”, relató a De 12 a 14 (El Tres) aún desde la zona del hallazgo producido antes de las 12 y en donde trabajaba la Policía.
“Quedé traumado, es feo”, continuó Cristian y dijo que el contenedor “tenía un par de bolsas pero la única que me llamó la atención fue esa; una bolsa blanca y se veía una pierna y me dio cosa”.
El joven trabajador informal aseguró que avisó a “un vecino de acá la vuelta que no me creía y me tenía miedo y yo le decía: «Venga señor, fíjese», pero ninguno se quería asomar hasta que fueron saliendo y lo vieron con sus propios ojos”.
Afectado, con lágrimas en sus ojos, Cristian reconoció: “Está grabado en mi cabeza. Tengo familia, no se lo deseo a nadie”.
Por otro lado, una vecina de esa cuadra de barrio Saladillo de la zona sur de Rosario (uno de los tres puntos en donde se manifestó el hecho macabro) dijo que ella sacó la basura después de las 7 y esa bolsa no estaba.
La mujer agregó que el camión recolectar pasa por la zona a las 7. “No vimos nada”, agregó, por lo que los restos humanos debieron haber sido dejados entre las 7 y las 12.
El fiscal de la causa señaló que los homicidios (en principio dos) debieron ocurrir unas 12 o 24 horas antes y el descarte se produjo en las últimas horas en tres contenedores.